Se incubó la mega crisis económica mundial por causa de coronavirus
Los inversionistas internacionales están nerviosos y tienen más miedo a la caída de los mercados que al mismo coronavirus. Esta crisis nos traerá nuevos cambios mundiales que pueden experimentarse muy pronto.
Detrás del coronavirus viaja la recesión mundial. Ya están cayendo diferentes rubros de la economía mundial, como la industria del turismo, el servicio de líneas aéreas, la fabricación de manufacturas, la banca privada transnaccional, el petróleo, el comercio, la recaudación tributaria de cada país, como también las importaciones y exportación de materias primas.
La reciente caída de las bolsas mundiales ha tocado fondo al punto que no se experimentaba desde la gran crisis de 1930. Nos avisan que viene una mega crisis sin precedentes y de incalculables consecuencias planetarias en la medida que avance en el resto del mundo la pandemia declarada por la OMS; a pesar que en China ya está menguando y han controlado el brote, sólo va quedando la crisis interna y externa.
En WUHAN ya hay cierre de hospitales a raíz de la baja, un éxito chino con apoyos de tecnobiología y medicina cubanas para lograr este éxito; sin embargo, el covid-19 continúa viajando en el resto del mundo.
Los chinos a través de su cancillería acusan a EEUU de haber tirado el virus en WUHAN y no sabemos las consecuencias de comprobarse esta tesis.
Lo que sí es cierto es que el liderazgo del nuevo orden mundial es Rusia con una economía sobre valorada en oro puro e iniciando una guerra comercial con Arabia Saudita para golpear el petróleo que es la base de la economía mundial y estadounidense especialmente.
Ante esto, el recomendable de Cristina Lagard presidenta del Banco Central Europeo es que los gobiernos inyecten dinero a las economías nacionales y empresas grandes para sostener ingresos, impuestos, empleos y producción de las compañías, razón por la cual la FED para levantar las bolsas mundiales ha movido la imprenta a toda revolución y se ha inyectado un gigantesco rescate de 1.5 billones de dólares a la economía de los EEUU para intentar salvar los efectos de la bolsa americana.
Actualmente la industria petrolera se encuentra , al igual que otras transaccionales, reportando pérdidas a raíz de esta crisis.
El problema que se vendría después que un dinero sin respaldo podría ser una medida de corto plazo y podría provocar una caída estrepitosa de la divisa norteamericana y ceder ante el yuan que está a la espera de arrebatar la hegemonía mundial porque el dólar no está respaldado en oro y es frágil ante una devaluación mundia.
Esto profundizará aún más la crisis mundial y provocar la caída del sistema financiero actual dando paso a un nuevo sistema financiero manejado por el neófito orden mundial.
Esto puede iniciar con la desaparición del papel moneda y luego pasar a un sistema digital respaldado en oro.