La expansión y fúnebres secuelas del SARS/COV2 preocupa a las naciones y ha puesto de rodillas a gobiernos que han tenido que interrumpir el curso de vida normal para refugiarse en prolongadas cuarentenas en intentos por salvar millones de vidas de este asesino en serie.

(EN News) El Salvador ya está en la fase 2 de evolución de la pandemia que ya cruzó frontera para hacer estragos mediante la infección comunitaria la cual urge frenar con la “rapidez del rayo” a través de una barrida epidemiológica. Justo acá caen como agua del cielo las pruebas rápidas serológicas para detectar el anticuerpo del Covid-19.

Para combatir el coronavirus, sólo hay dos formas en el mundo: los distanciamientos sociales (insostenibles en el tiempo) y la actuación rápida en detecciones de la mutación del virus mediante cercos epidemiológicos.

Información reciente publicada en un matutino local se asegura que el 70% de las personas contagiadas de Covid-19 son asintomáticas lo cual representa grave riesgo para la población al estar interactuando entre sí sin tener conciencia que podríamos estar conviviendo con una muerte futura incluso en el seno del mismo hogar.

Ante esta situación de alarma la barrida epidemiológica es perentoria y necesaria porque el país está contra el reloj para contener una inminente cadena de contagios por el no uso de estas pruebas rápidas Serológicas que posibilitarían estudiar los anticuerpos de los individuos respecto al virus y en función de eso clasificarlos para luego los casos sospechosos sean sometidos a las pruebas de certero diagnóstico como es la prueba PCR de laboratorio.

Sobre los métodos de detección los sistemas de salud de cada país han usado esta prueba conocida como PCR (Reacción en Cadena de la Polimerasa) que ha demostrado ser una herramienta de laboratorio cien por ciento efectiva para el diagnóstico del Covid-19, aunque con un proceso engorroso y oneroso para las economías.

Las PCR son utilizadas por los laboratorios de microbiología y requieren de equipamiento específico, con elevados costos (entre $120 y $150 dólares c/u) y tarda mucho tiempo en arrojar resultados- mínimo 4 horas o días según demanda – aunque muy efectivas en el diagnóstico de la infección.

Con toda la efectividad de las PCR, se corre el riesgo que mientras se estén efectuando los diagnósticos, los contagios en cadena se disparen debido a los asintomáticos contagiados que siguen viviendo una vida normal pero a su vez están contagiando en diferentes puntos del país. Por ejemplo podría ocurrir que durante el proceso de detectarse 100 contagios existan simultáneamente en la calle el doble, el triple o el cuádruple de personas ya infectadas ignorando su enfermedad.

Afortunadamente y de forma complementaria existen los tests de pruebas rápidas serológicas mucho más rápidos y funcionales para hacer los barridos comunitarios con efectividad de acierto de detección del anticuerpo entre el 86% y el 92%, dependiendo la calidad de la prueba, por lo tanto, para evitar la expansión o desbordamiento de la pandemia son urgentes y podrían ser perfectamente adquiridos por las alcaldías, comercios e industrias (a un precio estimado de $14 a $18 dólares por kit), precio mucho más accesible para la población y los gobiernos, que salvará miles de vidas a empleados y población en general en los diferentes municipios del país.

Por qué se recomienda a los alcaldes y plantas productivas?, porque estos test de pruebas rápidos serológicas se orientan a grupos poblacionales con alta probabilidad de contagio ya que permiten lograr una dimensión real de la propagación del virus, rastrean mejor las cadenas de transmisión de la enfermedad, detecta enfermos asintomáticos, como también a los que tuvieron el virus e identifica su transmisión por zona geográfica.

Detectan la presencia de anticuerpos que son proteínas producidas por el sistema inmunológico para atacar los virus y las bacterias generadas por el organismo de un paciente ante la infección del COVID-19, pueden realizarse a partir de 3 gotas de sangre, no necesita equipamiento y refleja el resultado en tiempo express entre 10 y 15 minutos.

Según los expertos son muy útiles para hacer estudios epidemiológicos que permitan saber qué porcentaje de la población ha estado expuesta al virus y poder así prever como va a evolucionar la pandemia o establecer estrategias ante oleadas futuras y de vacunación.

Las pruebas serológicas o de anticuerpo son ideales como técnica de barrido comunitario; ejemplo, si un paciente sale positivo se clasifica como tal y si resulta dudoso o negativo habrá que recurrir a la prueba madre del PCR para su ratificación o descartar la portación del virus.

Mediante esta prueba serológica se clasificarían los casos positivos y se ahorraría un largo proceso trabajoso de lentos en resultados. Permiten ganarle tiempo y avance a la enfermedad, ya que son como un primer filtro para luego pasar a un paciente con presencia de anticuerpos al examen molecular PCR.

Si la muestra revela alguna cantidad de anticuerpos la prueba es positiva lo cual significa que la persona tiene o tuvo la enfermedad recientemente.

Según los especialistas en virología, una prueba no puede reemplazar a la otra y recomiendan que para combatir rápido la pandemia del Covid-19, tanto la serológica como la PCR van de la mano y son necesarias para que las sociedades contemplen una luz de esperanza de volver a la normalidad en la vida económica, productiva, trabajo, educación, recreación, etc.