Comer es una necesidad, pero hagámoslo con arte e inteligencia. Una salud con calidad es nuestra responsabilidad para una vida mejor.
Por: Mtra. Artemisa López, columnista EN News
(EN News) Desde hace tiempo a un miembro de mi familia le diagnosticaron “Pancolitis ulcerosa”: una enfermedad inflamatoria intestinal crónica en la que el intestino grueso (colon) se inflama y la úlcera se agujera o erosiona produciendo recidivas (brotes o crisis) de diarrea con sangre, retortijones abdominales y fiebre.
El riesgo de cáncer de colon a largo plazo es mayor comparado con el de otras personas que no sufren colitis ulcerosa. Pablo estuvo en tratamiento por algunos años con Prednisona y una dieta, en esta dieta quedaron prohibidos los siguientes alimentos: lácteos y sus derivados, azúcares refinadas, harinas con gluten, pescados y mariscos, col, frijol, huevos, condimentos irritantes y poca carne roja.
La referencia anterior, tiene la intención única de dar testimonio, de la importancia de cuidar lo que comemos. Desde que mi familia inició con una dieta alimenticia sana, la salud de todos mejoró.
Sé que para una gran mayoría es difícil dejar ciertos alimentos, pero ante el despiadado COVID-19, tenemos que mantener en óptimas condiciones nuestro sistema inmunológico, evitar a toda costa que éste se deprima para que sea capaz de hacerle frente a este virus y a otras bacterias que hay en el ambiente, resfriados persistentes, etc.
Una tendencia de estar enfermos de gripe es una evidencia de un sistema inmune débil. No esperemos que nadie, haga lo que nos corresponde, mientras estemos conviviendo con Covid-19, (que será por largo tiempo) estamos obligados a cuidarnos nosotros mismos, a ser responsables en el cuido de nuestra salud, porque las cosas no volverán hacer igual; que nos quede bien claro, hagamos lo propio y tomemos el control de nuestras vidas.
Por lo anterior, es recomendable evitar o consumir lo menos posible los siguientes alimentos:
*Los azúcares, encabezan la lista negra; la ingesta puede dañar nuestro sistema, por lo que será necesario evitar o consumirlos de manera moderada por el bienestar de nuestra salud.
*Los refrescos, una sola lata de 355 ml. Contiene entre 30 y 50 gramos de azúcar y según expertos este ingrediente disminuye la efectividad de tu sistema inmunológico tan solo diez minutos después de haberlo bebido.
*Las carnes rojas, contienen una gran cantidad de sustancias tóxicas, en especial la grasa animal, la cual impide la formación de linfocitos, que son los encargados de la elaboración de anticuerpos.
*El exquisito café, que nos despierta por las mañanas, también está en la lista negra. Especialistas de la Clevelan Clinic señalan que la cafeína en exceso tiene la capacidad de disminuir tu respuesta inmunitaria frente a diversas enfermedades.
*La sal, el consumo excesivo de ésta se relaciona con el crecimiento de células de enfermedades autoinmunes, como la diabetes. Además, el sistema inmune actúa sobre los tejidos sanos, dañando a nuestro cuerpo, olvidándose de luchar en contra de los agentes patógenos que nos causan diferentes padecimientos.
Por último tenemos a los lácteos enteros, estos productos contienen una molécula llamada Neu5Gc, que los humanos no producimos de manera natural. Estas sustancias pueden ser absorbidas por las células, y generar anticuerpos dañinos para el organismo. Por supuesto, la invitación es limitar el consumo de estos alimentos y demás azúcares refinadas para tener en óptimas condiciones nuestro sistema inmunológico.
Los expertos de la escuela de medicina de la universidad de Harvard para evitar enfermedades, recomiendan la ingesta de frutas y verduras, como el ajo, cítricos, pimientos, brócoli, jengibre, entre otros.Tengamos siempre presente, que “sólo porque no estés enfermo no significa que estés sano”
Y todos ustedes se preguntarán ¿Por qué estoy enterada de lo antes mencionado? La respuesta es muy simple, cuando estás preocupada por la salud de un miembro de tu familia, la tendencia es siempre a documentarse, a indagar e investigar de manera profunda, todo lo relacionado con dicha enfermedad.
Lamentablemente, PAPÁ GOBIERNO, en la mayoría de países del mundo no está interesado en regular la publicidad de alimentos poco saludables y ni en los efectos que éstos tienen en la población. Y es aquí cuando debemos de despertar, aún sin haber tomado café, y decidir hacer nosotros mismos lo que nos compete, para cuidar nuestra salud.
Termino con una frase del escritor Mark Twain. El estadounidense resalta la importancia de que a veces hay que hacer pequeños sacrificios en la alimentación para conseguir un bien mayor, sobre todo, hay que eliminar los EXCESOS. No pasa nada porque algún día nos demos un homenaje, pero hay que controlar bien las cantidades y calidad de lo que comemos.
En la medida de lo posible evitemos las grasas saturadas, los fritos, los productos demasiados azucarados y consumamos más frutas, verduras, legumbres, carnes y pescados de calidad. Al final tu cuerpo se acostumbra a estos alimentos bien sanos y te enamorarás de su sabor.
No querrás otra cosa. Y cerramos con una frase muy nuestra. En la cocina, comida sana y divina. Pues eso, que nos encanta comer y si es sano, mucho mejor.!