En el primer aniversario de gobierno del Presidente Bukele la diáspora salvadoreña a través de uno de sus representantes emblemáticos, Danny Amaya, le pone nota 9 a su gestión y le exhorta a seguir trabajando con el mismo empeño para ponerle el 10 luego de los comicios 2021.

(EN News) El 1 de junio del 2019, El Salvador surcó una luz de esperanza en su porvenir con la llegada al poder político de uno de los presidentes más jóvenes de la historia: Nayib Armando Bukele Ortez, quien en medio de una oposición hostil ha sabido gobernar aún en tiempos de crisis como el Covid-19.

Para los seguidores y amigos del Presidente de la República, como el empresario salvadoreño- americano, Danny Amaya, el Presidente Bukele llegó al poder vendiendo esperanzas a un pueblo que hoy día ve germinar el fruto de su trabajo en materia de seguridad ciudadana, reacción inmediata ante la pandemia del COVID-19 y solidaridad con los más afectados por la tormenta tropical Amanda.

“Hoy es un día especial por un año de gestión de una figura que tengo el honor de llamar mi presidente, quien ha venido a romper paradigmas con ejemplo de trabajo y cambiando en apenas un año la historia de El Salvador y abre una esperanza de un mejor porvenir a miles de salvadoreños “, dice Danny Amaya.

En su análisis gobernar en tiempos difíciles de alta tensión no es tarea fácil, sobre todo con la oposición sistemática de un sector político conservador que teme a los cambios de verdad que favorecen a las clases más vulnerables; por eso exhortó a la militancia de Nuevas Ideas a endosarle todo el respaldo al gobierno ahora más que nunca.

“El presidente Bukele es un hombre honorable y sencillo que deja de lado sus preocupaciones personales para trabajar sin descanso por su gente tal como lo hemos apreciado desde el exterior los compatriotas que vivimos en acá ”, expresa Danny Amaya, también representante de la diáspora en USA.

El empresario extiende la invitación a la población salvadoreña estar pendiente de los acontecimientos en El Salvador y trabajar de la mano y hombro a hombro con el gobierno actual para seguir haciendo historia y cosechando frutos en beneficio de las presentes y futuras generaciones que tanto lo necesitan.

Danny Amaya considera importante no volver atrás la mirada y mejor preocuparse por hacer un gran equipo nacional para enfrentar cada problema como un reto de superación, tal como lo asume el gobierno actual que tiene en el timonel del barco a uno de los mejores hombres que vio nacer El Salvador.