En las últimas semanas se reportan situaciones bastante misteriosas sobre el conteo oficial que existe de los casos covid-19 en el país; algunos propietarios de funerarias aseguran que varios cadáveres son confundidos con el virus Covid 19, aunque no sea la causa de su muerte.

(EN News) Según fuentes conocedoras de la realidad en el hospital de Chalatenango, este jueves fue enviado un cadáver a tempranas horas de la mañana a una funeraria de la cabecera para su respectiva velación en privado y minutos después el personal habría recibido llamada del Hospital Nacional Dr. Luis Edmundo Vásquez, ordenando que el cuerpo no fuera expuesto mientras no se reconfirmara en el expediente clínico las causas del deceso.

Situación bastante sospechosa dado que el cadáver ya había salido de la morgue de este nosocomio público hacia la referida funeraria y minutos después se giraron instrucciones que aún no se expusiera a los familiares porque estaban inconclusos los respectivos análisis clínicos. “Esta situación llama poderosamente la atención”, según los informantes que pidieron reserva de su identidad.

En similares circunstancias en Chalatenango falleció semanas atrás un indigente que deambulaba en la cabecera departamental; de acuerdo a la versión de los familiares falleció de paro cardíaco, mientras el centro hospitalario público lo reportó como caso de coronavirus y ordenó su funeral de inmediato con protocolo Covid.

Dada esta situación, El Norteño News consultó a varios administradores y empleados de funerarias de la zona norte del país y las fuentes aseguran que sí hay una confusión entre sepelios de casos Covid versus enfermedades de otra naturaleza, situación irregular que impide a los dolientes dar el último adiós a su familiares fallecidos.

En otro hecho misterioso, este medio informativo conoció que en el hospital Nacional San Rafael de Santa Tecla, recientemente murió una señora chalateca de edad avanzada y fue reportada oficialmente por el Ministerio de Salud con dignóstico Covid 19; sin embargo, la familia asegura fehacientemente que no murió de coronavirus.

Sobre este caso en particular se conoció que el hospital nacional San Rafael no querían entregarle el cuerpo a sus familiares y únicamente se logró el recibimiento de la fallecida mediante la gestión de una persona influyente del departamento de Chalatenango lo que permitió darle cristiana sepultura.