Este año ha estado lleno de grandes retos derivados de la pandemia y una caída en la economía mundial, lo que ha causado el cierre de negocios, pérdidas de empleos y la asignación de recursos a la atención de la emergencia sanitaria. Ante esto, adaptarse a las circunstancias es una estrategia que ha sido clave en distintas industrias.
(EN News) Es así como CALIDAD INMOBILIARIA llevó a cabo el lanzamiento de sus nuevos servicios de desarrollo inmobiliario, bajo un concepto de evolución que busca satisfacer necesidades actuales.
Luego de comprender los cambios que estaba sufriendo el mercado, la empresa con más de 18 años de trayectoria en la industria decidió reinventar parte de su oferta de servicios para generar valor al patrimonio de sus clientes, enfocándose en asesorarlos para ayudarles a reducir riesgos, potencializar su eficiencia operativa y encontrar soluciones rentables a través de una asesoría integral.
“Decidimos sumar servicios de desarrollo de proyectos inmobiliarios para terceros y construcción a la medida, de manera que podamos brindar una asesoría completa que ayude a nuestros clientes a ampliar su portafolio de inversión y lograr sus objetivos de negocio” indicó Rafael Monzón de CALIDAD INMOBILIARIA.
La situación actual ha obligado a muchas empresas de distintas industrias a transformar su forma de trabajar, sus productos y servicios e incluso sus modelos de negocio. Es gracias a la capacidad para anticiparse y evolucionar lo que ha permitido a muchas empresas contar sus historias de éxito.
“En CALIDAD INMOBILIARIA decidimos convertir las adversidades que enfrentamos en oportunidades, lo que nos mantiene como pioneros en el mercado” expresó Rafael Monzón de CALIDAD INMOBILIARIA.
Según noticias publicadas en El Salvador con datos de la Cámara Salvadoreña de la Industria de la Construcción (CASALCO) información que se tenía del producto interno bruto (PIB) al primer trimestre de este año, manejaba una proyección de que en el segundo trimestre el sector construcción tendría un decrecimiento del -15 %.
Sin embargo, los resultados oficiales publicados por del Banco Central de Reserva arrojaron una contracción del -17.5 %, lo que significaría que el impacto de tres meses de paralización total de la actividad de la construcción afectaría en términos de empleos directo, con lo cual se perderían un 26 % del total, equivalentes a unos 7,000 puestos de trabajo.
Para CASALCO reinventarse en medio de esta pandemia es el mejor concepto que se debe utilizar para seguir avanzando y posicionarse como uno de los rubros que aporta mayor crecimiento a la economía salvadoreña.
