(EN NEWS)—Familiares de cuatro jóvenes desaparecidos en abril del año pasado se encuentran esperando ser llamados para someterse a la prueba de ADN y saber si los cadáveres encontrados en una tumba clandestina de El Paisnal son de su grupo familiar.

Al menos cuatro cadáveres han sido recuperados en el cementerio clandestino situado en caserío Las Huertas del cantón Las Delicias, El Paisnal, al norte de San Salvador, informaron familiares dolientes.

Lugareños aseguran que aparte de los jóvenes desaparecidos han hallado otros cuerpos que fueron escondidos en esas tumbas.

Las excavaciones al final de un cañal iniciaron el 2 de febrero y según los lugareños, los restos humanos fueron hallados un día después; ahora están en estudio forense del Instituto de Medicina Legal de San Salvador.

Familiares de cuatro jóvenes desaparecidos en abril del año pasado se encuentran esperando ser llamados para someterse a la prueba de ADN y saber si los cadáveres encontrados en una tumba clandestina de El Paisnal son de su grupo familiar.

“Por la ropa que tenían los cadáveres que estaban en las fosas, se cree que son los muchachos desaparecidos. Sacaron varios costales con restos humanos; de los cuatro, a dos los habían desmembrado y dos estaban enteros o completos”, dijo un allegado de la familia de desaparecidos.

Algunos parientes manifestaron que están pendientes del llamado de la Fiscalía General de la República para ir a Medicina Legal a someterse a la prueba de ADN y así determinar si los cadáveres encontrados corresponden a los cuatro jóvenes que desaparecieron el 12 de abril de 2021.

“Ahorita solo estamos esperando que nos llame Fiscalía; yo llamo casi todos los días para saber cómo va la investigación. No se sabe si los cuerpos encontrados son nuestros parientes, eso se sabrá hasta que nos hagan el examen de parentesco de Medicina Legal (la prueba de ADN)”, señló un familiar de desaparecido.

El día de la desaparición, Fredy Alberto Calderón, de 24 años; Enrique Silvano Tejada Santamaría, de 21; Jorge Alberto Vides de Paz, de 35; y Moisés Alexander Miranda, de 27 años de edad, fueron raptados por pandilleros mientras departían en una cervecería de Aguilares.

Las cuatro víctimas desaparecieron junto a sus dos motos en las que se habían movilizado en pareja desde El Paisnal a Aguilares.

Familiares han negado que los muchachos pertenecieran a alguna pandilla y que esa fuera la razón de su desaparición. En la zona donde ellos residían opera la pandilla 18.