Texto y Fotografías:
Wilfredo Díaz-Editorial-UES para          EN News

Las rocas volcánicas, se forman cuando el magma o la lava se enfrían, formando diversos tipos de cristales pequeños. Se cree, que las rocas volcánicas, atraen vibraciones positivas, estabilidad emocional, serenidad, paciencia y sirven de terapia en momentos de estrés.

El Volcán de Santa Ana o Ilamatepec, como muchos lo conocen, es el mayor de los volcanes y el tercer punto más alto de El Salvador. Tiene una altura de 2,382 metros sobre el nivel del mar, ubicado en el departamento de Santa Ana al occidente de El Salvador. Su historia geológica se remonta hace 22 millones de años.

Los volcanes en El Salvador, siempre han existido, algunos han tenido más actividades continuas que otros, expulsando gases y cenizas, como el de San Miguel o Chaparrastique, Santa Ana o Ilamatepec, San Salvador o Quezaltepec, Caldera de Ilopango, Izalco y San Vicente o Chichontepec. Se consideran volcanes activos, aquellos que han tenido erupciones en los últimos 500 años, en el caso del de Santa Ana, presentan un cráter bien formado y sus últimas erupciones han ocurrido en 1904, 1920 y 2005.

Para confirmar la historia de los gigantes dormidos, acompañe a los docentes y estudiantes de primer año de la carrera, Ingeniería Geológica de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de El Salvador, para hacer un estudio de tres zonas donde se han encontrado rocas y avalanchas volcánicas. Cada uno de ellos tiene su propia historia, característica, estructura, potencia a la hora de expulsar cenizas o lava y dependiendo de eso, así es la distancia donde caen los residuos como rocas.

Los docentes y estudiantes tenían claro su misión, desarrollar una guía técnica de la materia y hacer un reconocimiento de los lugares donde hay vestigios volcánicos. Salimos en busca de las rocas y avalanchas volcánicas, visitamos tres lugares, que a simple vista es un espectáculo natural. Nos recibe un clima caluroso. Llegamos al primer punto de investigación, la playa Los Cóbanos, ubicada en el departamento de Sonsonate, a unos 87 kilómetros aproximadamente de San Salvador.

Cada estudiante prepara su equipo, para verificar, estudiar y analizar las rocas y la arena, que dan un toque mágico al lugar. Un ambiente interesante, que me transportó al período de hace aproximadamente 44 mil años, fecha que se ha calculado sucedió esa avalancha.

“Feliz día a todas y todos, este día estudiaremos la acumulación de materiales sólidos, causado por procesos naturales como las erupciones volcánicas y la estratigrafía, que es la rama de la geología, que estudia, interpreta, identifica, describe, da una secuencia tanto vertical y horizontal de las rocas. Para tener buenos datos, partiremos de la observación del paisaje, identificación, depósito de avalanchas y escombros de rocas volcánicas”.

“Este depósito, ubicado en la playa Los Cóbanos del departamento de Sonsonate, corresponde a una avalancha de escombros proveniente del colapso del volcán de Santa Ana, que sucedió hace 44 mil años. Debido a su fuerte erupción, expandió rocas a 50 kilómetros aproximadamente de distancia, estas llegaron a la orilla de la playa y recorrieron unos 6 kilómetros ganando terreno al mar. Con el tiempo, ayudó a que se formara un arrecife de coral de los más grandes e importantes de El Salvador”.

“La arena de esta playa está formada por partículas de caracoles, corales, conchas, moluscos y otros crustáceos, por eso es blanca. Hay rocas típicas de ambientes sedimentarios como calcarenitas, conglomerados y rocas andesitas volcánicas que vinieron desde el volcán de Santa Ana. Ojo no deben extraer nada, esta es un área natural protegida, por recursos naturales,” asegura, el doctor Miguel Hernández, coordinador de la carrera de Ingeniería Geológica de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de El Salvador.

Seguíamos en Los Cóbanos los estudiantes estaban emocionados de ver ese espectáculo natural. Toman sus herramientas y comienzan a verifican y analizan los cristales de las rocas volcánicas. Hacen su trabajo con mucho detalle, esmero y atención, identificando la forma redondeada de las partículas de la arena.

Se cree, que ese volcán tenía una altura mucho más grande de lo que ahora es. Su colapso seguro fue provocado por su mismo peso y la cantidad de roca que había sobre él, se transportaron en la avalancha a muchos kilómetros.

Ese material volcánico sigue ahí y la gente pasa desapercibida de ellas, sin saber su historia, teniendo un atractivo geoturistico. Ya con los datos obtenidos en la playa Los Cóbanos, partimos rumbo al segundo destino. Ya en la coaster, los estudiantes sacan su repertorio musical y comienzan a cantar para no aburrirse del viaje. De repente, todos guardan silencio, suena la canción, Amor Prohibido, de la fallecida cantante mexicana, Selena Quintanilla.

Me quedo tranquilo, pongo atención al timbre de voz y veo, que quien cantaba es la estudiante, Yasiri Salguero, una voz muy parecida y espectacular. Nuestro viaje continúa y mientras llegamos, conversaba con una estudiante sobre los esfuerzos que hace ella y sus padres para estudiar su carrera universitaria.

“Mis planes académicos eran estudiar Ciencias Jurídicas, pero terminé en Ingeniería Geológica, por falta de cupos. Al principio dude, ahora me siento motivada más cuando hacemos prácticas de campo, que me permite conocer sobre la geología del país, la idea es concluir y servir a la sociedad”.

“Estudiar una carrera universitaria, requiere sacrificio de mi parte y mi familia, más cuando no hay recursos para alquilar un cuarto en San Salvador. Vivo en Ilobasco, ubicado en el departamento de Cabañas. Me levanto a las 2 de la mañana, el primer bus pasa a las 3, estoy llegando a la UES a las 6:30, mi primera clase es a las 7 en punto de la mañana y no debo fallar”.

“Mis padres hacen un gran esfuerzo por sacarme adelante con mis estudios, ellos a esa hora de la madrugada me acompañan a la parada del bus, para que me venga a la universidad y así me esperan cuando regreso tipo 8 de la noche, más cuando tengo mis días de prácticas”, asegura, María Natividad Rodas Portillo, estudiante de primer año de la carrera de Ingeniería Geológica de la Universidad de El Salvador.

Al fin, llegamos al segundo destino, los acantilados de la playa El Palmarcito, ubicado en el municipio de Tamanique del departamento de La Libertad, un lugar espectacular. Ahí se logra ver un acantilado natural, formado de rocas, volcanosedimentarias que evidencia una dinámica de erupciones volcánicas intercaladas con sedimentación marina, lo cual se identifican por los colores que tienen las piedras, que se encuentran en la orilla del mar.

A este lugar, solo permiten el acceso a profesionales, que investigan estos hechos históricos.

Cada lugar tiene su propia historia interesante, llegamos al tercer y último punto, nos estacionamos frente al puente río Chilama del departamento de La Libertad, ahí en el nuevo Bypass del Surf City, lugar donde hay depósitos del colapso del antiguo volcán Jayaque, ahora conocido como Cordillera del Bálsamo. Este se descubrió, cuando construían la nueva carretera, que conduce al puerto de la Libertad. Su erupción, fue hace 3 millones de años, sus rocas hicieron un recorrido de unos 40 kilómetros de distancia hacia el mar.

Los estudiantes recogen sus muestras para analizarlas en el laboratorio de Petrología de la UES. Los veo cansados del viaje y el calor, ya habíamos recorrido unos 210 kilómetros de ruta. Toman sus cosas, nos subimos al coaster y salimos rumbo a la UES, con la idea de seguir investigando la historia de la geología de El Salvador. Una experiencia académica, llena de sabiduría de los docentes y geólogos del Alma Mater.