Hoy tengo el honor de presentaros al poeta venezolano José Antonio Rosales Bettelli.
@apotropaico_verso

Artista visual, escritor, poeta, fotógrafo y pintor. Promotor cultural y
miembro de una asociación literaria hispana, fundador de una revista digital y ha colaborado en varias antologías.En 2022 publica su primer poemario: “Epítome al Breviario de una Noche” de la editorial “JBernavil.”

Lo podrás adquirir en amazone.

Actualmente está trabajando en su nuevo libro.

Hoy disfrutaremos de dos poemas inéditos. Cerraremos con un tercer poema de mi autoría.

✔Por Mirelha
@mireyaguzmanburgos

Poema 1

BREVARIO ARSESPIRIT

La poética atmósfera
en que Dios renunció
a traducir el bingo.

(Instaurado por encima del predeterminismo)
Artífice caudal de brizna
en la columna brumosa
de un aparatejo
con “antítesis” de lote,
en cuyo reloj sin pilas
se consumo la fecha [De expedido]
en que huesos son jornadas
en el apagador que enciende [Como cocuyo]
lo intransitado e inamovible.

Mundo citado por la forma
pero ha de mutar la análoga imagen
en los cortafuegos del tragaluz…

Allí, D I O S Es
mucho más
que un escritor sin lectores.

Poema2
SHE, SUBLIMIS

“En tus ojos de tenidos cinceles,
el “suprapoema” guardo  la página en blanco,
donde he vuelto a escribir los diseños del idilio”.

Habitas,
entre aquellas páginas
[Profundas]
de esta selva subcutánea,
caminante en la espesa
hondura
que expatria al mundo,
entre la luna
y la mitigada identidad
de quien la mira
remotamente recóndita.

“¿Y quién mira?”
Lo que en “infrapieles”
[Ciudades]
exilio lo inhóspito,
para ser yacer
[El hábitat]
de la correspondencia
un plano meditabundo,
(Monada)
que
N O
presupuestan
los segundos en leves
aceras de la sustancia.
[C A S A]

Tu estancia te recibe desabrochando
la camisa de fuerza y colgándola
en los percheros ulteriores
ignorados por la densidad
[Dérmica]

En:

I
Lo mismos percheros
que han hecho
de la memoria
“LIBRERO”,
pero no existe imprenta
donde la historia efervece
ante la luminiscencia
de su crecimiento herbario…

II
Ocultando al astro
que se desprende
de los dedos,
para anidar la soltura
de un nudo expuesto
a su propia ilegitimidad…

Y llegas:

Y tu visita aclama
un espíritu elevado
(Por las formas/ Por contornos/ Por imágenes)
disolviendo de la ruina
una ciudad que no calla
su áspera hambre…

Llegas, y la hierba se eclipsa
por encima del rayado público,
para librar a una cabina
de su mutismo hermético,
ejerciendo la oratoria del silencio…

Llegas,
y el abismo entre espejos
y quien lo cincela
[Arden]
en la pausa de un retrato
diluido en un salto de página.
[El mismo espacio
que ningún vestigio
habita del hombre
y su historia]

Postdata:
Amar, desde la hondura
de un vacío inocuo
al que la especie
teme por saltar,
tan sólo por dirimir
sus construcciones
de cartón y plástico.
[Inmerso
en sus propias
falacias,
este paisaje
que no roza
los dedos
nos (ha) embriaga (do)]

[Sección “Huella Poética ” bajo la dirección de Mireya Guzmán Burgos escritora de nacionalidad española. @mireyaguzmanburgos.
Escribe poesía bajo el seudónimo de Mirelha]