Estudio del proyecto WE3A revela las barreras de las empresarias salvadoreñas
(EN NEWS)- A medida que el mundo evoluciona, nuevas tendencias se hacen presentes. El desarrollo de los mercados, provocado por la pandemia COVID-19, ha traído un fuerte crecimiento y oportunidades en nuevas áreas y formas de comercialización.
En la actualidad, las mujeres son propietarias de 30% de los negocios a nivel mundial, sin embargo, solo 1% de las compras globales se destina a este tipo de empresas. Para BID-Lab y We-Fi, los financiadores del proyecto WE3A, es crítico para la región potenciar el crecimiento de los negocios de las mujeres para alcanzar un mayor desarrollo.
Por la razón que se menciona anteriormente, Thunderbird School of Global Management, implementador regional del proyecto, contrató a WeConnect International, una organización global sin fines de lucro, para llevar a cabo una investigación denominada “Ecosystem Mapping” (Mapeo de Ecosistemas), en la cual se estudió a 6 países de América Latina y el Caribe: Guatemala, El Salvador, Costa Rica, Honduras, Ecuador y Guyana, con el fin de poder identificar los principales retos y necesidades que las mujeres empresarias de la región están enfrentando.
Esta investigación tomó en cuenta los siguientes procesos: Fase documental, mapeo de ecosistemas, consultas con las partes interesadas y mesas redondas, de modo que se propiciara la mayor obtención de datos y estos arrojaran resultados veraces.
La investigación incluyó a 3 grupos: mujeres empresarias (WOBs por sus siglas en inglés), compradores (cadenas productivas) y organizaciones públicas y privadas que trabajan apoyando a las pymes de mujeres. De esta forma se pudo determinar los retos y necesidades de las pequeñas y medianas empresas de mujeres para su desarrollo e inclusión dentro de los mercados globales.
Uno de los componentes claves en la investigación fue el impacto de la pandemia COVID-19 en estos comercios. En su mayoría, se registró un impacto negativo, teniendo como principal desafío la disminución en la demanda de productos y servicios de estos negocios.
Para el caso de El Salvador dos de los principales desafíos que como WOBs identifican son: Barreras para acceder a productos financieros formales (es decir, créditos, cuentas de ahorro, etc.) y la burocracia y tramitomanía para abrir y operar negocios.
“Según los datos obtenidos a través de la investigación realizada, en Honduras solo el 17% de las empresas están registradas como empresas propiedad de mujeres y es importante apoyar a su empoderamiento económico, por tal razón el proyecto WE3A contribuye al impulso y desarrollo de mujeres empresarias con capacitaciones”. Dijo Georgina Meléndez, Directora de WE3A para Thunderbird.
En cuanto a las necesidades que más sobresalen son: Ferias de negocios y otros eventos para conectar con los compradores y también, el acceso a Productos y servicios financieros para mujeres empresarias y pymes.
El siguiente cuadro muestra como las pymes de mujeres evaluaron las necesidades principales para la recuperación empresarial en el período posterior al COVID-19. Evaluación basada en una escala de 1 (no necesario) a 5 (más necesario).
Las empresarias salvadoreñas destacan como principal necesidad post pandemia COVID-19 la de encontrar nuevos clientes y luego la importancia del relacionamiento con el ecosistema empresarial para identificar nuevos mercados. El proyecto WE3A responde de forma directa a todas estas necesidades.
We3A es un esfuerzo que busca fortalecer a las empresarias en cadenas productivas. El nombre WE3A se deriva de las siglas en inglés para Women Entrepreneurs (mujeres emprendedoras) y de los tres pilares de colaboración en torno a los cuales se construye: mujeres emprendedoras que Aspiran, se Activan y se Aceleran.
Por otro lado, de cara a los compradores, la investigación arrojó que en un 85% la calidad es el principal criterio de evaluación de proveedores. Esto significa que las empresarias deben estar muy bien preparadas con las destrezas requeridas para entrar a un mundo muy competitivo donde no se les favorecerá por su condición de género.
A la vez, la sensibilización a los compradores es crucial pues pueden ayudar a preparar a las mujeres con las competencias que se requiere para ser proveedoras.
Son muchas las necesidades que las mujeres empresarias salvadoreñas presentan, por tal razón el proyecto WE3A ofrece como parte del proceso, herramientas que permiten cerrar las brechas existentes para incursionar en mercados globales.
En términos de redes y contactos hay dos iniciativas, una es el registro gratuito en We Community, que permite el enlace entre emprendimientos de mujeres con los compradores en las empresas, y el segundo es la certificación de WeConnect International que las certifica como Women Business Enterprise, abriendo así muchas oportunidades y potenciando el aceleramiento aunado a las capacitaciones brindadas desde WE3A.
Con la ayuda de los resultados de la investigación, más allá de conocer el mercado, se busca responder a las necesidades reales que pueden incluir: capacitación, redes de contactos a las empresas propiedad de mujeres y a la vez sensibilizar a los compradores y otros actores del valor de invertir en potenciar la perspectiva de género en sus cadenas productivas. Como dijo Nelson Mandela, “Si quiere cambiar el mundo, ayude a las mujeres”.