(EN NEWS) – Los acontecimientos que están ocurriendo en Nicaragua mantienen preocupados a los obispos salvadoreños, entre ellas la condena de 26 años de prisión contra el obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez.

Estas acciones del régimen de Daniel Ortega fueron calificadas como “graves” por la Conferencia Episcopal, de esta manera apoyan lo expresado por el papa Francisco este domingo en Roma.

Monseñor Rolando Álvarez se encontraba   bajo arresto domiciliario, pero luego de que se negara a ser expulsado hacia Estados Unidos junto a otros 222 presos políticos nicaragüenses, fue enviado a prisión.

Esta medida fue tomada por el presidente Daniel Ortega, el 9 de febrero, cuando Álvarez fue puesto en la cárcel La Modelo, de Tipitapa, y condenado por los delitos de conspiración, propagación de noticias falsas, obstrucción de funciones agravadas y desacato.

“Expresamos nuestro dolor, preocupación, solidaridad y cercanía con los obispos de Nicaragua y con toda la iglesia de esa amada nación, especialmente con monseñor Rolando Álvarez, quien está encarcelado y ha sido condenado a 26 años de prisión”, señala el comunicado de la Conferencia Episcopal de El Salvador.

Monseñor Rolando Álvarez y papa Francisco.

La Conferencia Episcopal ya había mostrado su preocupación por la situación que se vivía en Nicaragua en junio pasado, en torno a la seguridad del obispo Álvarez, cuando el el régimen de Daniel Ortega expulsó al nuncio apostólico, a 18 religiosas de la Orden de las Misioneras de la Caridad y cerró medios de comunicación católicos.

El 8 de febrero, una jueza sandinista condenó a seis religiosos, entre ellos dos sacerdotes.