(EN NEWS) – Una vez más, el cardenal Gregorio Rosa Chávez mostró este lunes su rechazo a los decretos aprobados por la Asamblea Legislativa para procesar a las personas capturadas en el régimen de excepción vigente desde el 27 de marzo de 2022.
Se trata de más de 71,000 personas que serían agrupados en grupos de 900 personas para acusarlos ante tribunales de crimen organizado; el gobierno asegura que todos pertenecen a clicas de la Mara Salvatrucha, MS-13, o canchas de la pandilla 18.
El cardenal, que desde un inicio se opuso al régimen de excepción, expresó que “un error se cubre con otro error cuando no se admite el error”. Explicó que esta dinámica de no admitir errores está en el país; que por ello no se corrigen los errores y “salen nuevos errores”.
“Una cosa es el debido proceso, que es un derecho humano, esta ley no permite un debido proceso, lo dijo el arzobispo ayer, a ustedes, y tampoco permite la presunción de inocencia, dos pilares de la democracia”, respondió Rosa Chávez ante la pregunta de un priodista sobre si los decretos aprobados garantizarán justicia.
Por su parte, el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, que tiene una postura contraria a Rosa Chávez, dijo este domingo en la conferencia de prensa posterior a la misa que los decretos aprobados para procesar a los 71,000 capturados, servirán para aplcar una pronta justicia y dejar en libertad a muchos que presuntamente son inocentes de los cargos que se les imputan.
De igual manera pidió «un trato digno» a los culpables de quienes sostuvo «tienen que cumplir la ley», pero aclaró que han perdido el derecho a la libertad y no el resto de derechos.
El régimen de excepción es aplicado desde el 27 de marzo de 2022, luego de una matanza de 87 salvadoreño por parte de las maras y hasta el momento hay diversas opiniones de analistas políticos, diputados e incluso de la iglesia ante esta medida que ha sido avalada por más del 80 por ciento de la población salvadoreña que ha señalado que gracias a esa medida se está viviendo en paz y no como antes que las pandillas y las maras gobernaban gran parte delpaís.