Subinspector que mató a su esposa policía ayer sufría de ira por una lesión en su cabeza
Reporte: Carlos Armando Alas
(EN NEWS)—Esto se deriva de una conversación que sostuvo su hermano, Raúl Nolasco, con periodistas de diferentes medios luego de presenciar el hecho sangriento en la Colonia Escalón en San Salvador.
Raúl Nolasco se preguntó por qué la corporación no lo había separado del ejércicio a sabiendas de su padecimiento mental a raíz de un disparo que recibió en la cabeza en colonia La Campanera en Soyapango durante el auge de la guerra pandilleril en la zona.
Raúl Nolasco dijo desconocer problemas concretos entre las víctimas que dejan a dos hijos en abandono paternal “Si tanto era su incomprensión mejor se hubieran separado”, lamentó. El subdirector fallecido ingresó a la corporación policial desde en 1993, recién firmados los acuerdos de Paz que la crearon como un parto democrático.
En el hecho que ocurrió ayer en horas de la mañana entre la 15 calle Poniente y 87 Avenida Norte, de la colonia Escalón, en San Salvador, frente a la embajada de Ecuador, los cuerpos de los elementos policíales quedaron en el vehículo; se trata de Gloria Arely García de Pérez, una cabo policial, y el sub inspector Ricardo Pérez Nolasco, quien después de matarla se suicidó con un disparo en la cabeza.
Pérez tenía asignado el ONI E1209 y laboraba en la Unidad de Tecnologías de Información y Telecomunicaciones (UTIT), mientras que Gloria Arely García de Pérez, tenía el ONI 13602 y estaba destacada en la sección de Trabajo Social, en el departamento de Salud Mental.
El reporte de las primeras indagaciones señala que la pareja de esposos estaba en proceso de separación; tenía dos hijos, y vivían en Colonia Altavista de Antiguo Cuscatlán.