¿Cómo el aumento del 9% en el precio de la electricidad golpea los bolsillos de los salvadoreños?
Por Alessia Genoves
Hasta un 9% ha incrementado los precios del consumo de energía eléctrica, según lo declara la Dirección General de Energía, Hidrocarburos y Minas (DGEM). La entidad reguladora sostiene que el incremento en los precios se debe principalmente a la reducción de lluvias en julio-septiembre de 2023 respecto a años previos, impactando sobre la generación hidroeléctrica y obligando al uso de más energía térmica, que es más costosa que la hidráulica.
También atribuye el alza de precios a los a los “conflictos geopolíticos globales que encarecieron los combustibles para las plantas térmicas locales”. Frente a ello, asegura que el alza de precios pudo ser de hasta el 16.5%, pero que se contraería al 9% por la implementación de políticas tales como la diversificación de la matriz energética. Pero éste medio consultó a los minoristas, quienes alertan sobre un posible incremento en los precios de sus productos.
Electricidad más cara
En cuanto a las tarifas promedio por kilovatio-hora de las 8 distribuidoras reconocidas en los recientes informes de la DGEM, comparando julio 2022 vs 2023, los incrementos también difirieron por oferta, aunque el promedio fue de 9.4% en ese año.
La oferta punta de CAESS pasó de $0.112/kWh en enero a $0.135/kWh en julio de 2022, un aumento de 20.3%; la oferta resto incrementó 17.7%, de $0.110/kWh a $0.130/kWh; y la oferta valle tuvo un alza de 15.9%, de $0.114/kWh a $0.132/kWh. En promedio, las tarifas de CAESS aumentaron 17% de enero a julio de 2022.
Por su parte, DELSUR registró un alza en su oferta punta de 19.8%, al pasar de $0.112/kWh a $0.135/kWh; su oferta resto exhibió un encarecimiento de 17.1%, desde $0.114/kWh hasta $0.13/kWh; y su oferta subió un 45.1% de $0.1002/kWh a $0.146/kWh. En total, DELSUR acumuló un aumento promedio de 21.2% en ese periodo.
Impacto en comercios y negocios
El incremento en el precio de la electricidad está afectando los costos operativos de distintos comercios y negocios en San Salvador. Por ejemplo, en la pupusería “María” de Zacamil han reducido el tamaño de las pupusas a la mitad para mantener el precio de 4 por $1 dólar, según observó este medio.
Don Manuel, operario de la pupusería, señaló que no reciben subsidios en la tarifa eléctrica por tener 2 tambos y consumir más de $35 mensuales. Estimó que con el alza de 9% pasarían de pagar $35 a casi $38.50, es decir, $3 dólares más en su factura.
Asimismo, Doña Rosa Gómez, comerciante de ropa interior en el Mercado Zacamil, afirmó que con el incremento en la luz “hoy está todo peor”, encareciendo los costos de producción y alimentos. En la tienda Grupo GB la empleada García coincidió en que al subir la electricidad, suben los precios en general.
Pero en una peluquería del Centro Comercial Zacamil los precios de los servicios se han mantenido, aunque la estilista Soriano señaló alzas en insumos y herramientas. En resumen, el alza eléctrica presiona los márgenes de las mypes, trasladando parte del impacto a los consumidores.
Comida más cara
El alza de la electricidad también influye en el precio de verduras y otros productos importados de Guatemala, incrementando el costo de la canasta básica para los hogares salvadoreños, que para agosto ya registraba un incremento anual de 6.79%, llegando a $255.19; mientras la Rural aumentó 5.32%, alcanzando $189.02, según cifras del Banco Central (BCR).
Según los mayoristas, las verduras como la zanahoria han subido más de 80% en mayoristas como La Tiendona, al pasar de $12 a $22 el quintal ante el cierre intermitente de fronteras. La lechuga se encareció 88% de $9 a $15 el quintal; el brócoli 25% de $16 a $23; y productos como el huisquil duplicaron sus precios de $7 y $8 a los $15 y $20 la bolsa en pocos días.
Comerciantes atribuyen estos aumentos a mayores gastos en transporte y pérdida de productos perecederos por las protestas en Guatemala, que provocan cierres fronterizos y desabastecimiento en El Salvador..