Habitantes de Jiquilisco contarán con el servicio de agua potable con apoyo de la DOM
Comunicado Institucional
Habitantes de cinco comunidades de Jiquilisco que por más de 23 años no han tenido agua en sus hogares, se mostraron muy entusiasmados este domingo 18 de febrero ante el anuncio del Gobierno del Presidente Nayib Bukele, a través de los representantes de la Dirección de Obras Municipales, que pronto la escasez del vital líquido será cosa del pasado
Los representantes de la DOM visitaron los hogares de algunas familias afectadas para informarles de primera mano que se inició la construcción de un sistema de almacenamiento, bombeo y tubería que ayudará a llevar el recurso hídrico a sus hogares.
Los representantes de la DOM fueron acompañados por la diputada Marisela de Guardado y el diputado Ángel Lobos quienes reiteraron todo su apoyo al Gobierno del Presidente Bukele y a la DOM para cumplir el sueño de 2,000 habitantes de esas cinco comunidades.
Esta segunda fase del proyecto de agua en Jiquilisco beneficiará a más de 2,000 habitantes de las comunidades Gaviota 1 y 2, Los Lobos, Palo Seco y María Antonieta.
Los habitantes que durante la visita se observaba que transportaban agua que compraban a propietarios de tres pozos en la zona, cifraron gran esperanza por el anuncio de la DOM, tras resentir a los gobernantes que durante 23 años fueron ignorados.
Alma Montano y Carlos Mauricio Amaya representan a una de las 500 familias afectadas; su grupo familiar está integrado por nueve personas entre ellas dos menores de edad. Ambos detallaron todo el calvario y el costo económico que deben correr a diario para abastecerse.
La pareja afirmó que en su caso consumen cuatro barriles de agua por día, lo que implica pagar $4 diarios y al mes, más de $120, cantidad de dinero que les impide tener una mejor calidad de vida ya que por comprar agua se privan de una mejor alimentación, educación, salud, vestuario y cubrir otras necesidades.
La primera fase del proyecto de abastecimiento de agua en las cinco comunidades de Jiquilisco, consistió en la perforación de un pozo de 150 metros de profundidad y la segunda fase permitirá la construcción de una subestación eléctrica, instalar dos bombas eléctricas, instalación de una red de distribución de 3,600 metros, una caseta para control de bombeo, 560 metros de acometidas y medidores de agua.