Xiomara Castro pierde confianza de su pueblo por presunta corrupción
Redacción: Abigail Rivera
(ENNews)—Carlos Zelaya, cuñado de la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, confesó haber participado en una reunión con un líder narcotraficante, causando revuelo y alarmando a la población catracha.
Medios internacionales indicaron que Zelaya, diputado del partido Libertad y Refundación (Libre) y secretario del Congreso, admitió haber participado en una reunión en 2013 con el grupo narcotraficante conocido como “Los Cachiros” para recibir apoyo a una campaña política.
Este reconocimiento se produce poco después de que el gobierno hondureño anunciara la cancelación del tratado de extradición con Estados Unidos, vigente durante más de un siglo. Este tratado ha permitido la extradición de 64 hondureños a EE.UU., incluidos el expresidente Juan Orlando Hernández, condenado por narcotráfico.
Los críticos creen que la cancelación del tratado podría ser una estrategia para proteger a la familia presidencial. Tiziano Breda, experto en Centroamérica, advirtió que esta medida podría perjudicar a la presidenta Castro, quien llegó al poder prometiendo luchar contra la corrupción.
Los hondureños aseguraron estar desilusionados con el gobierno de Castro, haciendo caer su popularidad, puesto que el cambio prometido no se ha visto, en cambio, aumentó el desempleo y la violencia. Además, se le acusa de nepotismo y corrupción en la administración.
En un esfuerzo por restaurar la confianza, Castro ha nombrado a Rixi Moncada Godoy como nuevo ministro de Defensa. Sin embargo, la situación deja a Honduras en un momento crítico, con la corrupción y la violencia como desafíos persistentes.
Publicar comentario