Redacción: Abigail Rivera

(ENNews)—La escalada de hostilidades en la Franja de Gaza y Líbano no cesa, dejando un rastro de muerte y destrucción. Este lunes, al menos 15 palestinos perdieron la vida en un bombardeo del Ejército israelí en el norte del enclave palestino, donde las fuerzas israelíes han intensificado sus ataques, alegando una renovada ofensiva contra Hamás.

Según fuentes internacionales, los ataques se concentraron en la ciudad de Beit Lahiya, donde los aviones israelíes bombardearon una zona de viviendas que albergaba a familias de desplazados. Las cifras de víctimas podrían aumentar, ya que varias personas siguen desaparecidas y los equipos de rescate luchan por encontrar sobrevivientes entre los escombros. Los hospitales de la región, afirmaron que no pudieron atender a todos los afectados a causa de la sobrecarga y con escasez de insumos.

La ofensiva israelí ha causado incendios en varias viviendas en Jabalia y Beit Hanoun, además de Beit Lahiya, mientras el Ejército de Israel justifica sus acciones como una medida para evitar que los militantes de Hamás se reagrupen en el norte de Gaza. Sin embargo, los palestinos denuncian que estas acciones son parte de un plan para forzar evacuaciones y establecer un control militar en la región.

El exministro de Defensa israelí, Moshe Yaalon, ha criticado abiertamente al gobierno de Benjamin Netanyahu, acusándolo de llevar a cabo “crímenes de guerra” y “limpieza étnica” en Gaza, lo que ha provocado una fuerte reacción de la administración actual. Las Fuerzas de Defensa de Israel defienden sus operaciones, afirmando que actúan de acuerdo con el Derecho Internacional y que las evacuaciones de civiles son necesarias para su propia protección.

Mientras tanto, en el sur de Líbano, la situación también es tensa. Al menos dos personas murieron en ataques israelíes, lo que pone en riesgo la frágil tregua que se había establecido el 27 de noviembre, tras más de un año de hostilidades transfronterizas entre Israel y Hezbolá. Las autoridades libanesas han denunciado violaciones del alto el fuego, mientras que Israel acusó a Hezbolá de lanzar proyectiles hacia su territorio, lo que ha llevado a un aumento de las tensiones.

El presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, instó a la comunidad internacional a intervenir y detener las violaciones israelíes, mientras que el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Gideon Saar, aseguró que su país está comprometido con el alto el fuego, pero no tolerará violaciones que amenazan su seguridad.

La situación en Gaza y Líbano sigue siendo crítica, con millas de civiles atrapados en medio de un conflicto que parece no tener fin. La posibilidad de un alto el fuego duradero se aleja cada vez más, mientras las hostilidades continúan dejando un saldo trágico en ambas regiones. La comunidad internacional observa con preocupación la escalada de violencia y la urgente necesidad de una solución pacífica.