“Nunca voy a olvidar mi origen”, en una villa miseria (asentamiento) al sur de la capital“, decía el Astro del fútbol argentino.
(EN NEWS) Los resultados preliminares de la autopsia indican que Diego Armando Maradona, murió de “edema agudo de pulmón secundario e insuficiencia cardíaca crónica reagudizada. Corazón con miocardiopatía dilatada”, se informó.
Según un despacho periodístico de la Agencia AP, Maradona pasó varias veces por los quirófanos, incluso en situaciones dramáticas en el 2000 y 2004, emergencias originadas en sus adicciones y excesos. También estaba operado de una rodilla y caminaba con dificultad. Parecía mayor que sus 60 años.
Hacía años que Maradona había superado la adicción a las drogas duras. Pero seguía consumiendo alcohol, medicado con tranquilizantes y ansiolíticos.
Como jugador fue artista y mago de la pelota. Alcanzó la cima de su carrera como capitán de la selección argentina que ganó la Copa del Mundo en México-1986. Fue en ese mundial donde anotó sus dos goles más célebres, en cuartos de final ante Inglaterra.
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El primero con la mano, la famosa “mano de Dios”, y el segundo considerado el mejor en la historia de las citas máximas.
Pocas veces en la historia un personaje del deporte alcanzó semejante dimensión internacional. Era recibido con adoración a cuanto país llegaba y le reconocían su personalidad rebelde.
“Nunca voy a olvidar mi origen”, en una villa miseria (asentamiento) al sur de la capital“, decía el Astro del fútbol argentino.
Aquella cuna le forjó una conciencia en favor de los movimientos populares y se declaró admirador de los líderes de izquierda de Latinoamérica, como el cubano Fidel Castro, de quien fue su amigo. Curiosamente falleció el mismo día que el líder cubano.
