Hoy en día operan en el país decenas de casas de apuestas deportivas en línea sin regulación alguna y sin pagar impuestos, lo cual es aberrante.

(EN NEWS) Luego de conocerse la petición de nulidad de la Fiscalía General de la República( FGR) orientada a clausurar el contrato entre la empresa Tenlot y la LNB, se activó toda una alarma social porque sin duda se pone en riesgo la estabilidad económica a más de mil familias en El Salvador.

Con la actitud de ciertos grupos de poder tradicional de querer abortar este contrato se pone en la cuerda floja un beneficio social a más de 1,000 vendedores registrados y por ende el perjuicio latente para sus familias que dependen de este ingreso.

Así también se introduce a un limbo la estabilidad laboral de los 160 trabajadores de la Lotería Nacional de Beneficencia que también recibirían un bono por las ventas de los juegos en línea, más la pérdida de los beneficios de orden fiscal para el país.

“A la derecha económica y los partidos que juegan a apostarle a sus intereses no les conviene este beneficio para los emprendedores y trabajadores vinculados a esta nueva modalidad de juegos en línea ya que sus beneficios producirán más apoyo popular para el presidente Nayib Bukele”, “dicen expertos consultados.

Por lo tanto, en un contexto de campaña electoral sin duda la gran maniobra de los sectores conservadores de la élite económica respaldada por diputados de todos los colores partidarios en la Asamblea Legislativa, es tratar de politizar este tema al máximo.

En opinión de los conocedores de la temática, no existen argumentos legales convincentes para la nulidad del contrato entre Tenlot y la LNB; por tanto, la demanda fiscal está mal formulada, y para variar, se envío a una instancia judicial errónea, lo cual evidencia mala intención e ignorancia de sus detractores sobre el modelo de este negocio.

Aseguran que el sinismo político en el manejo de este tema controversial es tal, que los demandantes de nulidad no explican ante la faz de la nación que Tenlot puede operar sin la cuestionada alianza con la LNB; “anular el contrato bilateral sólo pone como principal perdedor al estado con 0 inversión, versus amplias oportunidades de recaudación tributaria a futuro”, dicen.

Según estudios hoy día hay otras plataformas digitales de juegos en línea que operan en El Salvador sin pagar impuestos, operando al margen de la legalidad sin licencia o permisos, y el estamento político guarda silencio sepulcral cuando se supone la principal apuesta/país es combatir la evasión y elusión fiscal.

Ante la grave polémica suscitada y el riesgo inminente de declararse nulo el contrato entre Tenlot y la LNB, los diputados deben ser más responsables y serios con el país; desde esta óptica urge crear una nueva ley para ordenar y regular todo lo relacionado a las apuestas y juegos en línea.

Para muestra un botón. Hoy en día operan en el país decenas de casas de apuestas deportivas en línea sin regulación alguna, sin pagar impuestos, y tampoco generan regalías a empleados y vendedores vinculados a la LNB, institución que urge de una modernización integral para su óptimo funcionamiento.