El coronavirus SARS-CoV-2 no es la primera epidemia a la que la humanidad se enfrenta. Ha existido a lo largo de la historia varias situaciones en las que una enfermedad afectaba fuertemente a muchas personas con efectos de carácter global.
Revisando su significado etimológico “pan”= ”todo” y “demo”=pueblo, podríamos interpretarlo como ‘el pueblo entero’. Aparece por primera vez en los diccionarios del idioma francés y español a mediados del siglo XVIII y en el latín en el siglo XVI (pandemius).
Por lo que vemos surgió por la necesidad de definir lo que desde aquellos tiempos ya se experimentaba sobre las generaciones y marcaba etapas en un antes y un después.
En ese sentido, hemos encontrado que grandes obras de creativos como Shakespeare, Munch y Boccaccio fueron hechas en cuarentena.
Plasmaron sin tapujos los efectos que produjeron dichas pandemias en sus obras para que hoy en día podamos tener un legado de esas cruentas etapas de la humanidad. Gracias a esos testimonios podemos conocer de primera mano lo que sucedió y como fue sobrellevado por el artista de esas épocas y el mundo entero.
Reconocemos que quizás en aquellos tiempos no se lidiaba con lo que hoy en día hubo que enfrentar, pues cada época en la historia es diferente, como por ejemplo en la actualidad hubo que vivir con la escasez de cosas como el papel higiénico, los artículos de limpieza, en alguna medida en algunos lugares con el poco alimento, y otras que ahora son parte de nuestro día a día.
Sin embargo, sí hubo cosas en común que son y serán siempre las mismas en esos escenarios, y es el hecho de lidiar con la ansiedad, la soledad, el alejamiento físico obligatorio para no contagiarse, la poca o nula oportunidad de socializar en forma presencial, indudablemente, en esto último, estar en la era de la información amortiguó en un porcentaje el aislamiento al poder tener acceso al internet y utilizarlo como un medio de ventilar nuestros días aquejados por la pandemia.
Bien, en la búsqueda de sobrellevar de mejor manera la cotidianidad del confinamiento, surgieron diversas situaciones, en las cuales el artista pudo aprovechar para desarrollar propuestas que hablaran sobre este tiempo crítico como lo hicieron nuestros antecesores del arte, es decir, hablando a través de sus obras escritas o creadas bajo alguna otra técnica artística, lo que importa es lograr la expansión de la voz más allá de las cuatro paredes que nos acogen.
El Coronavirus visto por artistas se cuela desde los estudios y espacios en confinamiento hacia las redes sociales, y de allí hacia el mundo entero. Así mismo, hoy podemos encontrar los resultados de esas largas noches de insomnio o días tediosos en el que el ser creativo de muchos sirvió de fiel compañero y nos dejan algunas obras como legado de este tiempo de pandemius del siglo XXI.
En Instagram encontramos muchas iniciativas de artistas, creativos visuales y escritores que han sido desarrolladas con el efecto pandémico. Por ejemplo, la cuenta de The Covid Art Museum bajo el usuario de @covidartmuseum publica las fotografías, vídeos, animaciones, arte digital, pinturas y mucho más.
También encontramos el proyecto editorial @elarteyyoentiemposdepandemia que trata sobre la producción de una obra monográfica de una recopilación de testimonios de 22 artistas de El Salvador que plasmaron una historia real durante el tiempo del confinamiento, llevando un mensaje de resiliencia y esperanza para la comunidad artística y público en general.
Encontramos también trabajos fotográficos como los de Paola de Grenet y me atrevo a sugerir uno de autoría “Juegos de Cuarentena”.
Y así, aun seguimos en esta lucha constante contra esa enfermedad que al parecer llegó para quedarse hasta que toda la masa haya adquirido la inmunidad respectiva y pueda generarse un alivio para continuar con la vida, mientras los artistas seguiremos plasmando en nuestras obras todo lo que se pueda sobre el asunto.
Cito las palabras del escritor salvadoreño Enrique Rivas en su reseña sobre el libro “El Arte y yo en tiempos de pandemia en el Salvador» en las cuales nos expresa lo siguiente: «El Arte y yo en tiempos de pandemia en El Salvador» es una interesante propuesta literaria y, quizás, es una obra que podría estar relacionada con un nuevo movimiento literario, la Literatura Postpandemia».
¿Entonces, será que estamos viviendo el surgimiento de una corriente artística nueva?
