(EN NEWS) –Noel Orellana, magistrado del TSE dijo que durante la sesión de trabajo del miércoles pasado, se estableció el 3 de marzo de 2024 como fecha tentativa para las elecciones de presidente, diputados y concejos municipales plurales.

Noel Orellana, magistrado propietario del Tribunal Supremo Electoral (TSE), informó ayer a “Diario El Salvador” que durante la sesión de trabajo del organismo colegiado el miércoles pasado se estableció el 3 de marzo de 2024 como la fecha tentativa para las elecciones de presidente y vicepresidente, de diputados de la Asamblea Legislativa y de concejos municipales plurales. “Propusimos que el 3 de marzo se desarrollen las elecciones de 2024”, dijo.

“Con esto damos un banderillazo de salida para que las diferentes unidades comiencen a trabajar en el Plan General de Elecciones [Plagel]”, afirmó Orellana.

El magistrado enfatizó que en la reunión acordaron desarrollar el Plagel y el calendario electoral. «Veníamos trabajando desde hace tiempo en el plan y el calendario. Las decisiones que se tomaron ayer [el miércoles] son producto de una planificación y trabajo previo que se venía haciendo. Se acordó instruir a las diferentes direcciones para que pongan en práctica todo lo planificado y que se comiencen a concretizar los planes», detalló.

Sobre el voto en el exterior, aseguró que solamente esperan que los diputados de la Asamblea Legislativa definan cuál será el método que se utilizará para que la diáspora ejerza su derecho al sufragio para que el TSE comience a desarrollar el trabajo que garantice votaciones seguras y democráticas para la diáspora.

“Dentro del Plagel estarán las estrategias de trabajo que llevaremos a cabo para el tema del voto en el exterior. Para esto es indispensable tener definido el método o sistema que se implementará para que nuestros ciudadanos en el exterior puedan ejercer este poderoso derecho a votar”, explicó.

Orellana consideró que uno de los desafíos que el Tribunal Supremo Electoral tiene que plantearse con respecto al voto en el exterior es garantizar que la legislación se haga efectiva en su totalidad y dar las facilidades para que el mayor número de compatriotas en el mundo que cumplen con los requisitos para votar pueda en un momento determinado hacer uso de ese derecho.

“El Tribunal tiene que trabajar, incentivar y facilitar los procesos para que nuestros compatriotas ejerzan el derecho sagrado que la Constitución establece y hacerlo con la participación en los diferentes procesos electorales”, concluyó.