ISSS, primera institución que realiza implantes de válvula aórtica en todo el Sistema Nacional de Salud Salvadoreño
(EN NEWS)—Por primera vez, el Seguro Social realizó dos implantes de válvula aórtica por vía percutánea, conocido por sus siglas TAVI (Transcatheter Aortic Valve Implantation) en pacientes diagnosticados con estenosis aórtica crítica.
Esto ocurrió sin necesidad de recurrir a una cirugía de corazón abierto. Se trata de una paciente de 89 años de edad, que adolecía desde hace tres años este padecimiento, lo que le estaba provocando dificultad para respirar y dolor en el pecho; la otra paciente de 79 años, igualmente con estenosis aórtica crítica, que presentaba cuadro de falta de aire con el esfuerzo y episodio de desmayo.
La intervención fue encabezada por el Dr. Nelson Ulises Bonilla, médico cardiólogo intervencionista y endovascular periférico de la Unidad de Terapia Endovascular del Hospital Médico Quirúrgico.
Además le acompañaron un equipo multidisciplinario conformado por médicos cardiólogos intervencionistas, cirugía cardiovascular, cardioanestesia, ecocardiógrafos, técnicos en rayos x, cuidados intensivos y personal de enfermería que abordaron a las pacientes de manera exitosa.
Durante el procedimiento se contó con la supervisión clínica de doctor Ignacio Amat, de nacionalidad española, quien se mostró satisfecho del resultado y el trabajo en equipo por parte del ISSS.
Se conoció a través de las directrices del ISSS que a nivel de la región Centroamericana, sólo Costa Rica realiza este tipo de procedimiento; ahora la institución se convierte en la primera de todo el Sistema Nacional de Salud en realizar este abordaje.
Una de las ventajas de este procedimiento es que son mínimamente invasivas, la recuperación es pronta, el paciente permanece hospitalizado de 24 a 48 horas, se realiza con anestesia local y puede reincorporarse rápidamente a sus actividades cotidianas.
Los pacientes que son candidatos a este procedimiento son aquellos mayores de 70 años de edad que tengan riesgo quirúrgico o un paciente que rechace el tratamiento de cirugía.
El dispositivo puede oscilar entre los $22 a $28 mil, y una cirugía de este tipo en el área privada puede rondar los 40 mil dólares. Un monto que se traduce a mejor pronóstico de supervivencia en el paciente, disminuir la mortalidad y mejorar la calidad de vida.
“Uno de los retos que enfrentamos a diario es brindarle a nuestras pacientes soluciones integrales en salud que les permita tener una mejor calidad de vida. Como Gobierno del Presidente Nayib Bukele estamos trabajando en transformar los servicios de salud, romper paradigmas y brindar servicios de salud dignos, humanos y de calidad”, indicó la doctora Mónica Ayala, directora general del ISSS.