(EN NEWS)-El Juzgado Tercero de Paz de San Salvador, ordenó tras realizarse la audiencia inicial, que se capture al expresidente de la República, Alfredo Cristiani y al coronel Inocente Montano, acusados de participar en el asesinato de seis sacerdotes jesuitas.

Cinco de las víctimas de nacionalidad española, además son acusados de participar en el asesinato de dos colaboradoras de los sacerdotes en 1989 en el contexto del conflicto armado de El Salvador (1979-1992).

“No queda más que decretar la detención en contra de esas personas, porque no se presentaron al juzgado y no enviaron abogados”, dijo el Juez durante la lectura de la resolución.

El Juzgado también ordenó que se proceda con la captura para los otros imputados en el caso, entre ellos, el exdiputado Rodolfo Parker, Óscar León, Nelson López, Joaquín Arnoldo Cerna e Inocente Orlando Montano Morales.

En el caso de Manuel Antonio Ermenegildo Rivas, Juan Orlando Zepeda, Rafael Bustillo y Camilo Hernández la sede judicial ordenó las medidas alternas a la detención por motivos de la condición de salud de los imputados.

Todos los implicados del caso están siendo procesados por omisión en el delito de asesinato, actos de terrorismo, fraude procesal y encubrimiento. “Estamos en presencia de hechos constitutivos de crímenes de lesa humanidad y de crímenes de guerra”, dijo a la prensa uno de los fiscales del caso.

Los únicos presentes durante la audiencia fueron el general retirado Bustillo, excomandante de la Fuerza Aérea de El Salvador, y el teniente coronel retirado Carlos Camilo Hernández.

“Estoy aquí de nuevo porque soy inocente, el martes me presenté (para conocer los cargos que se le imputan) y hoy de nuevo estoy aquí. Los falsos señalamientos que han traído hasta este momento que han manchado mi nombre y mi honor, no le debo nada a nadie”, declaró Bustillo.

Bustillo es parte de las 13 personas, incluido el expresidente Cristiani, involucradas en la masacre, de acuerdo con un requerimiento presentado el pasado 25 de febrero por el Ministerio Público ante la Justicia.

Por su parte, Cristiani presuntamente desde Italia, brindó declaraciones a través de una carta enviada a través de una de sus hijas. El exmandatario desmiente toda acusación por parte de las autoridades y asegura que todo se trata de un acoso político mediático.