Por Marina Sigüenza para “Arte y Literatura” EN News

Las redes sociales afectan a los adolescentes desde su consumo que se deriva de la herramienta importante en la que se ha convertido en la última etapa del sigo XX y el auge del siglo XXI. Medio de comunicación masivo, información inmediata, forma de interacción social.

Siendo la adolescencia una etapa de marcado protagonismo en todos los ámbitos, su forma casual de interacción y de cambio social, creando vínculos con amigos, intercambio de información, dinamismo e influencia; donde están creando su propia identidad.

Descubrir cualidades como la competencia y capacidades; es aquí donde se vuelve o juega un papel de suma importancia en la incursión y el desarrollo del adolescente, construyendo la necesidad de ser aceptado en un círculo, con la exigencia de sí mismo.

Las causas se agravan con la inversión de horas en navegar por el afamado internet y las redes sociales como consumo constante de lo que ofrece la tecnología cibernética; en un mundo globalizado que muchos adolescentes no comprenden y se debe de encontrar un equilibro entre la diversión y el buen uso de la información adquirida.

La vulnerabilidad de los más pequeños de los jóvenes tienen muchas causas adversas por su uso prolongado y no controlado, los hacen presas fáciles de sus efectos: crean dependencia emocional ante la carencia de afecto que es la peor consecuencia, causando ansiedad y depresión volviéndose adicto al uso de su móvil o portátil .

Esto se ve en aumento en muchos que caen en la comparación y baja autoestima al ver imágenes, fotos y videos de otros adolescentes viviendo estilos de vida que provoca envidia, queriendo tener lo mismo.

En los peores de los casos caen en la angustia y desesperación que los puede atrapar en la autodestrucción y llevarlos hasta el suicidio.

El uso inadecuado y el tiempo de consumo en las redes sociales lleva a trastornos severos a la salud mental, peligros al enfrentarse al chantaje y manipulaciones de oportunistas y depredadores al acecho.

Se encuentran con productos no aptos para niños, niñas y adolescentes como sexo, armas, drogas, violencia, rebeldía, esto y ante los llamados influencers dejando su contenido libre y sin reglas.

Otro daño es el miedo que se crean al no conseguir ser más populares que otros, creando en ellos compulsión y deseos insaciables de obtener más y mejores resultados de su uso, dejando tremendos vacíos, sentimientos de inferioridad, de soledad, fatiga y enojo incomprensible y difícil de manejar.

Pero no todo es negativo, tiene también muchas ventajas.

Encuentran aspectos positivos al descubrir a través de herramientas como las apps: aprendizaje, crean conciencia, expresión oral y visual, encontrar su identidad propia, apoyo emocional; eso con el buen uso de las redes sociales que les permiten un desarrollo personal, descubrir sus capacidades, experimentar y desarrollar cualidades con las que se identifiquen.

Alcance a la información académica con solo un clic, facilitando las tareas y en tiempos de pandemia las clases virtuales, ampliar la conexión del mundo, comprensión, perspectiva y visión al descubrir áreas de interés utilizando las plataformas educativas.

Asimismo desarrollar comunicación técnica en línea creando oportunidades, uso de sus cuentas para crear su hoja de vida con el objeto de mostrar su talento, logros y crear una vitrina positiva que le genere beneficio en su futuro.

Así también conectarse con sus amigos o grupos de amigos afines a su edad, creatividad y talento.

Los adolescentes también las utilizan para su expresión y gustos, descubren su creatividad artística como la fotografía, dibujo, arte plástico, diseño gráfico, arte a través de programas especializados en animación y cine, literatura convirtiéndose en escritores.

Como vemos todo a lo que los adolescentes están expuestos a través de las redes sociales, hemos mencionado pocas ventajas o resumidas con el objeto de quien esté al alcance de un móvil tenga la curiosidad de descubrirlos por si mismo y pueda darse cuenta que podemos encontrar mucho de lo positivo para compartir con nuestros menores y que ellos sean capaces de discernir entre lo negativo y positivo que le generan las redes sociales.

(Marina Sigüenza, Directora de Sección Arte y Literatura EN News)