Informa: Carlos Tobías, corresponsal EN News

Se trata de joven Ariel Pérez Hernández de 21 años, que habría agredido a una agente de la Policía Nacional de dicho país después de un juego fútbolisto el pasado domingo 29 de Mayo.

Sobre esta noticia, las autoridades policiales de dicho país quisieron hacer hasta escándalo mundial pidiendo la intervención de la INTERPOL para darle captura y prometieron recompensa de hasta 100,000 lempiras por su captura.

Según versiones de noticieros y sus familiares, el joven sintió pánico al saber todo lo que pesaba en su contra y decidió a través de terceros contactarse con personal de derechos humanos de dicho país para entregarse a las autoridades, pero mientras dicha institución de derechos humanos elaboraba los arreglos para la entrega del joven (agresor) de 21 años fue sorprendido por la Policía Nacional en la cercanías de canal 6 donde le dieron muerte.

“La autopsia nos revela que no hubo enfrentamiento, esta persona recibió una paliza”: dice Denis Castro Bobadilla, experto en Medicina Forense de Honduras. Según Bobadilla , Wilson Ariel Pérez Hernández sufrió varias contusiones y hasta fracturas que provocaron su muerte.

El destacado médico forense indicó que el joven de 21 años sufrió una muerte lenta producto de las múltiples contusiones que recibió en su cuerpo.

Bobadilla, analizó el informe de la autopsia realizada a Wilson Ariel Pérez Hernández, aficionado que agredió a una subinspectora de la Policía Nacional durante la final del fútbol hondureño entre Real España y Motagua.

De acuerdo con el profesional de la salud, la autopsia y las imágenes del cuerpo sin vida de Pérez Hernández revelan que el joven de 21 años recibió golpes y no murió en enfrentamiento, como lo señala erróneamente el informe de las autoridades.

¿Qué reveló la autopsia de Wilson Pérez?

“Si ustedes ven el cuerpo, las lesiones en la piel, esas son contusiones y esas corresponder a hemorragias internas en lo que es el paquete muscular correspondiente…»

«Si usted puede mover la parte media usted va a encontrar que la persona al momento de fallecer se encontraba en posición de cúbito lateral izquierdo por eso se ve que la sangre corre hacia ese sitio”, dijo Castro Bobadilla en entrevista con el canal HCH.

Posteriormente el forense añadió: “Ese muchacho vivió su propia muerte, ya que mientras desarrollaba el cuadro de hemorragia interna él quedó inclusive con los ojos abiertos, vivió su propia muerte y quedó con los ojos abiertos. Tendría que haber quedado con los ojos abiertos porque ese es el proceso de muerte lenta”.

Reporte de Carlos Tobías