El gobierno de Boris Johnson pende de un hilo: renunciaron 16 integrantes del gabinete británico en las últimas horas
(EN NEWS)- Después de las sorpresivas renuncias el martes de Rishi Sunak como titular de Economía y de Sajid Javid como responsable de Sanidad, dos nuevas dimisiones se han sumado a la “fuga” de miembros del Ejecutivo de Johnson.
El miércoles anunciaron su renuncia el secretario de Estado de la Infancia, el diputado Will Quince, y la ayudante parlamentaria en el ministerio de Transporte, la diputada Laura Trott. Los motivos alegados tienen que ver con el descontento por los escándalos que han salpicado al jefe del Gobierno.
En su carta de dimisión al primer ministro, Quince señaló que se apartaba del Ejecutivo con “gran tristeza” después de que Johnson reconociera -tras negarlo en un principio- que sí sabía que el diputado Chris Pincher -exresponsable de la disciplina del grupo parlamentario conservador- había sido investigado en el pasado por comportamientos inapropiados hacia hombres. Por su parte, Laura Trott señaló en su cuenta de Facebook que la confianza en la política es de «gran importancia», pero que en los últimos meses esa confianza “se ha perdido”.
Profunda crisis
Las dimisiones de Sunak y Javid -que eran considerados piezas clave en el Ejecutivo británico-, no fueron las únicas que se produjeron el martes. Además renunciaron otros diputados que ocupaban cargos de menor responsabilidad, entre ellos Bim Afolami, que dimitió como vicepresidente del partido, y Andrew Murrison, que se apartó como enviado comercial ante Marruecos. Asimismo, presentaron ayer la dimisión dos secretarios privados en el Partido Conservador, Jonathan Gullis y Saqib Bhatti.
El primer ministro conservador está hoy sumido en su crisis más profunda desde que ganó las elecciones generales de 2019. Johnson se somete hoy a la sesión semanal de control en la Cámara de los Comunes y también comparecerá ante la comisión de Enlace (que agrupa a los presidentes de todas las comisiones parlamentarias).
El líder conservador superó recientemente una moción de censura interna de su partido, pero la votación evidenció el descontento del 41 por ciento de los parlamentarios «tories» con su gestión y con la serie de escándalos que han salpicado al primer ministro.