(EN NEWS)- El ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, estuvo esta mañana en la entrevista Frente a Frente de TCS donde habló sobre las reformas a la ley de telecomunicaciones y ley contra el crimen organizado para combatir a los grupos terroristas y el crimen organizado

Villatoro señaló que el pasado miércoles 14 de septiembre el Ejecutivo presentó ante la Asamblea Legislativa las reformas a la ley de telecomunicaciones ya la ley contra el crimen organizado para combatir a los grupos terroristas y el crimen organizado, indicó que con esta última se pretende dejar un Estado y un sistema judicial sólido que permita combatir cualquier estructura criminal.

“Estamos presentando un paquete de reformas que va enfocado precisamente para que entendamos cuál es el enemigo de la sociedad. Como Estado estamos haciendo un planteamiento estratégico de reformas, no solo en el contexto de la guerra contra pandillas, las reformas que se están planteando son para dejar un Estado sólido, fuerte en contra de cualquier organización criminal”, apuntó el funcionario.

Agregó que en el pasado lo que se buscaba era demorar los procesos judiciales y proteger a los criminales. Señaló que con las leyes anteriores era difícil combatir judicialmente al crimen organizado, especialmente a las pandillas.

“Nos dejaron un sistema de justicia penal torpe, con el que nunca se iba a poder ganar una guerra en contra de las estructuras criminales. Lo que estamos haciendo es ordenando la casa, haciendo que el sistema de justicia sea más eficiente”, apuntó Villatoro.

El funcionario detalló que los antiguos procesos judiciales representaban un gasto para el Estado debido a lo extenso y repetitivo que son, además, acusó que con ellos se pone en riesgo las vidas de los testigos o de las personas que denunciaban a los criminales.

“Si presentabas un caso en contra de una estructura, a 50 miembros, solo llevabas 25 detenidos, los demás ausentes. Condenabas y a los ausentes tiempo después tenías que volver a hacer todo el proceso. Además, antes era bien sencillo, a alguien capturaban por extorsión y los abogados conseguían los datos de las víctimas, se los entregaban a los pandilleros y la mataban”, explicó Villatoro.