(EN NEWS)- El próximo 21 de diciembre termina la normativa migratoria llamada Título 42, impuesta por el expresidente Donald Trump en 2020 para expulsar a los migrantes, ante este panorama, miles de indocumentados de diferentes países de la región intensifican sus cruces migratorios de manera ilegal hasta Texas, en busca de poder tener oportunidad de asilo en Estados Unidos.

En su afán de ingresar, muchos migrantes tienen que dormir en las calles soportando temperaturas bajo cero, debido a que los albergues de El Paso, en Texas, están saturados y las personas se ven obligadas a adoptar como refugio las calles, aceras o parques de la ciudad ante la falta de espacios de los albergues.

“No hay capacidad en los albergues de El Paso” … “Hemos estado hablando de esto los últimos dos años. Le hemos insistido a la administración que era una locura y estaba fuera de la realidad pensar que las organizaciones no gubernamentales locales tendrían la capacidad de lidiar con algo que falla sistemáticamente”, dijo Fernando García, director ejecutivo de la Red Fronteriza por los Derechos Humanos, según información que recoge diario La Opinión.

Las autoridades de Texas indicaron que los recursos públicos no dan abasto para albergar a tantas personas que cruzan la frontera diariamente.

En la zona anteriormente recibían colaboración de hoteles de Texas, pero actualmente los costos que estos locales piden por brindar sus instalaciones son muy elevados, lo cual genera que los recursos sean más limitados para la atención de los migrantes.

Hace unas semanas el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), advertía que con la cancelación del Título 42 esperaban que los albergues de México Y EEUU colapsaran por el incremento de migrantes en las fronteras terrestres, en donde esperan un estimado de entre 9,000 y 14,000 solicitantes de asilo diariamente.

El 21 de diciembre se conoció que albergues en la frontera de EE.UU. y México se preparan para un eventual cruce masivo de migrantes tras el previsto fin del Título 42 de expulsión expedita de extranjeros el próximo día 21 y urgen al Gobierno estadounidense un trato digno para estos solicitantes de asilo.

“Anticipamos que tan pronto termine el Título 42 el número de migrantes que cruzan la frontera se incremente drásticamente. Esperamos recibir quizá de mil a dos mil migrantes por día”, dijo Norma Pimentel, directora ejecutiva de la filial de Caridades Católicas en el Valle del Río Grande.

La religiosa, quien por años ha estado al frente de la operación del mayor albergue para migrantes en Texas, asegura que actualmente hay miles de personas del lado mexicano que han esperado meses, e incluso años, para tener la oportunidad de cruzar la frontera y solicitar asilo.

Indicó que en estos momentos el albergue, que se encuentra en la ciudad de McAllen, recibe un promedio de 300 migrantes diariamente.

El 21 de diciembre se cumple el plazo que la corte dio al Gobierno de Joe Biden para prepararse para suspender el Título 42 al considerarlo “arbitrario” y “caprichoso”.

La polémica regla, implementada en 2020 por el expresidente Donald Trump con la excusa de la pandemia, ha permitido la expulsión de más de 2,5 millones de migrantes desde marzo de 2020, según datos de la organización International Rescue Committee. La norma permite a la Patrulla Fronteriza deportar de inmediato a los migrantes que cruzan la frontera de manera irregular, sin permitirles presentar sus casos de asilo.

Activistas y grupos que defienden a los migrantes han luchado por terminar con el Título 42, que se ha mantenido en vigor bajo la Administración Biden.

“Sólo esperemos que el país esté preparado para ofrecer un proceso correcto, humano; que se les dé a los migrantes la oportunidad de presentar sus casos y no nada más los deporten”, dijo Pimentel.

No obstante, expresó preocupación por las versiones en medios nacionales de que el Gobierno Biden podría implementar nuevamente otras restricciones aplicadas por Trump que hicieron prácticamente imposible que los migrantes permanecieran en Estados Unidos mientras se procesaban sus solicitudes de asilo.

Entre ellas se especula se podría revivir la regla del tercer país, la cual negaría el asilo a personas que han cruzado al menos otro país antes de llegar a Estados Unidos sin haber solicitado asilo en las naciones de tránsito, como México.

La Casa Blanca por su parte advirtió en un mensaje de Twitter de que la Administración continúa asegurando la frontera mientras mantiene un procesamiento ordenado, seguro y humano de los migrantes.

“Esto continuará cuando el Título 42 sea cancelado. Informes de que la política de Estados Unidos cambiará son incorrectos. No se han tomado esas decisiones”, enfatizó la Casa Blanca.

En preparación para lo que podría ser un nuevo cruce masivo de migrantes, albergues en Texas y Arizona se encuentran listos para activar una red de ayuda que incluye iglesias y organizaciones locales dentro de sus comunidades.

“Nos estamos preparando para tener ya estos contactos listos y poder responder de manera inmediata a las necesidades”, dijo Pimentel.

Lo mismo ocurre en el albergue Casa Alitas en Tucson, que recibe actualmente un promedio diario de 350 migrantes proveniente de otras ciudades fronterizas como Yuma y El Paso.

“Una vez que termine el Título 42 esperamos un significativo incremento en el número de migrantes que recibiremos. Esperamos un incremento de hasta mil migrantes por día”, dijo Teresa Cavendish, directora ejecutiva de Servicios Comunitarios Católicos del Sur de Arizona, quien representa el albergue.

Precisó que actualmente están recibiendo migrantes de diferentes países como Perú, Brasil, Cuba, Rusia, Ucrania e India, además de los países del Triángulo Norte de Centroamérica (El Salvador, Honduras y Guatemala).

El albergue prevé que una vez que termine el Título 42 llegarán migrantes de otros países como Venezuela y México.