Corte Interamericana dice a la OEA que Nicaragua está en “desacato permanente”
Fuente: AFP
(EN NEWS) – El presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Ricardo Pérez Manrique, dijo ante el Consejo Permanente de la OEA que Nicaragua está en “desacato permanente” de las resoluciones del tribunal.
“Nicaragua, pese a las medidas adoptadas por la Corte no ha adoptado ninguna decisión en línea con lo que la Corte ha resuelto”, declaró el magistrado en una sesión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), en Washington.
Agregó que el gobierno de Daniel Ortega persiste en un “desacato permanente”, pues no ha cumplido ninguna de las ocho resoluciones que la Corte emitió en los últimos dos años.
Pérez Manrique desestimó el argumento de Managua de que las personas detenidas estaban “procesadas por comisión de delitos”.
“En el derecho internacional no se puede invocar el derecho interno para incumplir una decisión [de un tribunal] internacional”, expresó el magistrado uruguayo.
“Cuando el tribunal [interamericano] encuentra a un Estado en desacato permanente como es el caso presente, el tribunal culmina su intervención y el camino que determina la Convención Interamericana [de Derechos Humanos] es ponerlo en conocimiento de los organismos de la OEA”, añadió.
No hay acuerdo
El Consejo Permanente se limitó a tomar nota de lo expresado por el presidente de la Corte, que tiene su sede en San José, pero no adoptó ningún acuerdo al respecto.
La Corte había declarado en noviembre a Nicaragua en “desacato permanente” y este miércoles presentó el informe respectivo al Consejo Permanente.
Dávila indicó que todavía hay “37 personas presas políticas” en Nicaragua.
“La Corte [Interamericana] ordenó nuestra liberación en el año 2021 y esta orden fue desacatada. El desacato continúa pues expatriación, destierro y exilio no es libertad”, agregó Dávila, quien pudo hablar en esta sesión porque el representante de Chile le cedió su lugar.
Managua ha ignorado las declaraciones y resoluciones de la OEA y sostiene que el organismo, y en especial su secretario general, Luis Almagro, siguen los dictados de Estados Unidos.