Agroindustria azucarera salvadoreña con la Huella de Carbono más baja a nivel mundial
(EN News) —Esta es una enorme conquista para un sector altamente estratégico en El Salvador, ya que sólo representa una emisión de gases equivalente al 1.18%, de las emisiones nacionales, según estudios del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Este estudio se dio a conocer en un evento que reunió a representantes del sector azucarero, miembros del Instituto Privado de Investigación sobre el Cambio Climático, autoridades de los ministerios de Medio Ambiente y de Agricultura, como también a la Sra. Kathrin Russner, directora del Programa Ideas para una Recuperación Verde de la GIZ; al unísono destacaron los esfuerzos del Sector Azucarero para abordar los retos ambientales y promover prácticas innovadoras.
La agroindustria azucarera salvadoreña, siendo el segundo mayor productor y exportador de azúcar y melaza en Centroamérica, está a la vanguardia en la implementación de medidas para contrarrestar los impactos del cambio climático. Con una producción anual de 6.5 millones de toneladas métricas de caña y 800 mil toneladas métricas de azúcar, el sector reconoce la importancia de equilibrar la productividad industrial con la sostenibilidad ambiental.
En el marco de este compromiso con la coexistencia planetaria, el Sector azucarero decidió implementar el Manual sobre Huella de Carbono y Huella Hídrica, el cual define estrategias concretas para reducir las emisiones de carbono y aumentar las absorciones, reflejando el compromiso del sector con la mitigación del cambio climático.
“Estamos dando un paso importante hacia prácticas agrícolas e industriales más sostenibles, manteniendo el equilibrio idóneo entre los ecosistemas humanos y ambientales”, destacó el Licenciado Mario Salaverria, presidente de la Asociación Azucarera de El Salvador.
El estudio de Huella de Carbono y Huella Hídrica del sector Azucarero, fue realizado por el Instituto Privado de Investigación del Cambio Climático, el cual revela resultados concretos sobre acciones ejecutadas con responsabilidad ambiental.
La baja huella de carbono se atribuye entre otros factores a la eficiencia del proceso productivo, la eficacia en el uso de fertilizantes durante la producción de azúcar por hectárea, el uso de biomasa de caña para generación de energía eléctrica, etcétera, dijo Salaverría.
En el evento, la Sra. Kathrin Russner, directora del Programa de Recuperación Verde de la GIZ, elogió los esfuerzos del sector y enfatizó la importancia de estas iniciativas en el contexto internacional de la lucha contra el cambio climático.
El Sector azucarero también está impulsando la innovación agrícola e industrial como un mecanismo para mejorar la competitividad. La implementación de prácticas productivas innovadoras, resistentes a los efectos del cambio climático y eficientes en el uso de recursos, es una parte integral de este enfoque.
Además, se destacan las prácticas promovidas por el sector para proteger la salud de los trabajadores, abarcando desde técnicas de siembra y fertilización hasta regulación del transporte y manejo del agua.
En un mensaje a los productores de caña, el presidente de FUNDAZUCAR, Licenciado Tomás Regalado Papini resaltó los retos y las oportunidades futuras, incluida la diversificación de productos con mayor valor agregado, como alimentos y bebidas con azúcar, y la exploración de programas para la producción y consumo de etanol.
En el contexto del Congreso de Productores de Caña(PROCAÑA) el sector azucarero de El Salvador reiteró su compromiso con la sostenibilidad y la contribución al desarrollo social y económico del país. “Este congreso representa un espacio para compartir conocimientos, abordar desafíos y continuar construyendo un futuro más sostenible para la agroindustria azucarera salvadoreña”, puntualizó el Licenciado Mario Salaverría.