Redacción: Abigail Rivera

(ENNews)—Tras el violento enfrentamiento entre las fuerzas israelíes y los militantes de Hezbollah, respaldados por Irán, un saldo de 47 personas han sido trasladadas a hospitales, según informaron fuentes médicas. El incidente se produjo en medio de la creciente tensión en la región, particularmente en el sur de Líbano, donde se concentraron los combates.

Medios internacionales informaron que el Centro Médico Ziv, ubicado en Safed, al norte de Israel, recibió a 38 heridos transportados en helicópteros y ambulancias militares, de los cuales tres llegaron en estado grave.

El Campus de Atención Médica Rambam en Haifa informó que trató a cuatro personas, mientras que el Hospital Beilinson del Centro Médico Rabin, en Petah Tikva, acogió a cinco heridos más. Aunque los hospitales no confirmaron si las víctimas eran soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), la mayoría de los heridos provienen del enfrentamiento con Hezbollah, según declararon las autoridades hospitalarias.

El ejército israelí confirmó la muerte de ocho soldados en combate, mientras que Hezbollah aseguró haber atacado a las fuerzas israelíes en el sur del Líbano, intensificando aún más la violencia en la zona fronteriza.

Estados Unidos evacúa ciudadanos ante la escalada de violencia

Paralelamente, el gobierno de Estados Unidos organizó un vuelo chárter para evacuar a ciudadanos estadounidenses de Líbano. Matt Miller, portavoz del Departamento de Estado, anunció que más de 100 personas, incluidos ciudadanos estadounidenses y sus familiares, fueron trasladadas desde Beirut a Estambul este miércoles. Miller también señaló que se planifican más vuelos de evacuación en función de la demanda, dado que aproximadamente 7.000 personas se han registrado para recibir información sobre opciones de salida del país.

Aunque el Departamento de Estado ha aumentado la capacidad de vuelos dentro y fuera de la región para facilitar la salida de estadounidenses, la administración Biden no ha implementado una evacuación formal de no combatientes (NEO), lo que implicaría una evacuación más amplia del personal no esencial en Líbano.

Este nuevo episodio de violencia entre Israel y Hezbollah agrava la situación en la región, mientras los esfuerzos internacionales se centran en evitar una escalada mayor que pueda arrastrar a otros actores internacionales al conflicto.