Aumentan casos de enfermedad “boca, mano, pie” en escuelas de Ahuachapán

Redacción: Abigail Rivera

(ENNews)—En las últimas semanas, la comunidad educativa de Ahuachapán ha encendido las alarmas ante el notable incremento de casos de la enfermedad conocida como “boca, mano, pie” entre los alumnos de diversas instituciones educativas. Padres y madres de familia han expresado su creciente preocupación por la salud de sus hijos, quienes se han visto afectados por esta infección viral.

Médicos consultados han explicado que la enfermedad es causada por una variedad del virus Coxsackie y afecta principalmente a niños de hasta 14 años. Se caracteriza por ser altamente contagiosa y, aunque generalmente es leve, puede generar síntomas que incluyen sarpullido, fiebre, dolor de garganta y llagas en la boca, los cuales pueden confundirse fácilmente con los de la varicela.

En el Centro Educativo Liceo Evangélico La Atarraya, los profesores han reportado más de diez casos en las últimas dos semanas. Por su parte, en el colegio Montecarmelo de las Hermanas Bethlemitas, se han contabilizado al menos 16 contagios en alumnos de parvularia. Otros centros educativos, como el colegio Metodista y el Liceo Profesor Flavio Jiménez, también han registrado al menos un caso cada uno.

El personal docente ha lamentado la falta de un protocolo de bioseguridad claro por parte de los ministerios de Salud y Educación, lo que ha llevado a cada institución a implementar medidas de prevención a su criterio. Entre las acciones adoptadas se encuentran el aseo constante de las instalaciones y la fumigación de los espacios. En el caso del colegio Montecarmelo, se han optado por clases virtuales para los grados donde se han reportado contagios.

“En parvularia registramos contagios”, comentó un maestro del colegio Montecarmelo, reflejando la preocupación que se vive en el ambiente escolar.

La comunidad educativa hace un llamado a las autoridades para que se establezcan protocolos claros y efectivos que ayuden a controlar la propagación de esta enfermedad y garanticen la salud de los estudiantes. Mientras tanto, padres y maestros continúan trabajando juntos para proteger a los niños y minimizar el impacto de esta situación en el entorno escolar.