En momentos difíciles pongamos a prueba nuestra compasión, solidaridad, empatía y simpatía
“La filosofía debe esclarecer y delimitar con precisión los pensamientos que de otro modo serían opacos y confusos”: Ludwig Wittgenstein.
(EN News) Hay cuatro términos que juegan un papel muy importante ante la situación que estamos viviendo: empatía, compasión, solidaridad y simpatía.
En primer lugar, está la COMPASIÓN quien se encarga que experimentemos tristeza a causa de lo que a otros les ocurre cuando padecen algún sufrimiento.
Es una emoción, en la cual nosotros queremos que alguien deje de padecer porque esa escena nos hace sufrir y ésta nos conduce a la caridad.
En segundo lugar, tenemos a nuestra amiga EMPATÍA: ella es la responsable de un razonamiento de identificación con otros individuos que nos lleva a comprender el principio ético de igualdad.
En tercer lugar, gozamos de la presencia de la bella SOLIDARIDAD, siendo ésta uno de los valores humanos que, por excelencia, se define como la colaboración mutua en las personas, y este hermoso sentimiento nos mantiene unidos en todo momento, pero sobre todo cuando vivimos experiencias difíciles.
Este valor se encuentra muy ligado al amor.
Y en cuarto, aunque no menos importante lugar, nos acompaña la gran señora SIMPATÍA, quien nos transfiere la energía de querer beneficiar las necesidades y deseos de otros individuos.
Y bien, las conjugaciones de estas cuatro grandes emociones nos hacen que seamos mejores seres humanos, más espirituales y generosos.
Por ello, es digno y merecedor brindar un aplauso, un reconocimiento a todas aquellas personas que están siendo compasivas, empáticas, solidarias y simpáticas con las familias que tienen problemas económicos ante la escasez de empleo.
Es necesario SUMARNOS a este proyecto.
Creo que ninguno de nosotros podemos ir a dormir tranquilamente, sí sabemos que algunas personas se fueron a dormir con el estómago vacío.
Creo en Dios, como también en la generosidad de cada uno de los mexicanos y Latinoamericanos; creo en la hermandad, en la fraternidad, en la amistad, en la concordia y en el compañerismo, pero sobre todo creo en TI, porque estoy segura que mañana saldrás de casa con una sonrisa dibujada en tu rostro, con júbilo, con entusiasmo y con todas las medidas de seguridad que estos tiempos exigen, para llevarle alimento a quienes lo están necesitando.
Felicitaciones para todos aquellos que YA se sumaron a este propósito y la invitación para los que aún lo están pensando.
Vamos, anímate y sé parte de este cambio, atrévete a ser el mismo pero DIFERENTE. ¡VAMOS MÉXICO! Y LATINOAMÉRICA, SI NUESTROS GOBIERNOS NO PUEDEN O NO QUIEREN, NOSOTROS UNIDOS LO HAREMOS POSIBLE.