El presidente LenÃn Moreno derogará el decreto 833, que suprimÃa el subsidio a combustibles, luego de llegar a un acuerdo con los lÃderes indÃgenas.
El movimiento indÃgena doblegó al presidente ecuatoriano, LenÃn Moreno, y le obligó a derogar el polémico decreto que elevaba el precio de los combustibles, poniéndolo a él y a Ecuador entre la espada y la pared frente al Fondo Monetario Internacional (FMI).
El 883 pasará a la historia para muchos ecuatorianos como el decreto que condujo a la peor ola de violencia social en los últimos años, una situación que para muchos pudo preveerse y haber hecho colapsar toda la institucionalidad.
Los once dÃas de protestas no han dejado ni mucho menos vencedores en el campo de batalla polÃtica, y de hecho parece que solo hay perdedores.
«Posiblemente, los actores centrales en este conflicto hayan subestimado la capacidad de actuación del otro», valoró para Efe el analista Daniel Kersffeld un dÃa después de que las partes principales alcanzaran un acuerdo para revisar toda la estrategia del Gobierno frente al organismo financiero.
Para Kersffeld, el Gobierno no pensó que la Confederación de Nacionalidades IndÃgenas (CONAIE) «arrastrarÃa a Quito a más de 20,000 indÃgenas, ni que tendrÃa energÃas suficientes para afrontar una huelga de tantos dÃas de duración y capacidad de acciones simultáneas en todo el paÃs».
«El movimiento indÃgena, igualmente, subestimó la capacidad de respuesta por parte del Gobierno: el nivel de represión de los últimos dÃas es inédito en la historia de un paÃs trazado por reiteradas convulsiones sociales», puntualizó. El acuerdo responde, a su juicio, a que ambas partes empezaron a dar «signos de debilitamiento y de reprobación creciente por parte aquellos sectores que optaron por mantenerse fuera del conflicto».
Los destrozos y pérdidas ocasionadas por la paralización del paÃs -los indÃgenas cerraron las principales vÃas causando desabastecimiento- y el alto número de vÃctimas por la represión policial de las protestas -entre 5 y 7 muertos y un millar de heridos-, no son los únicos daños. Ayer, aproximadamente 40 vuelos seguÃan cancelados en el Aeropuerto Internacional «Mariscal Sucre» de Quito; se espera que hoy el tráfico aéreo «se reanude y se normalice casi al cien por ciento».
Una funcionaria decÃa este lunes a Efe, sin dejarse identificar, que se habÃa «resquebrajado también el tejido social» y que habrá que ver ahora cómo sanar las heridas que deja este conflicto. Pese a que también tomaron parte en actos de vandalismo, el Gobierno ha exonerado de responsabilidad al movimiento indÃgena, y volcado toda culpa en el correÃsmo.