Educación, es la cartera de Estado con mayor beneficio económico con una partida de $1,320.4 millones, equivalente a un 5% del Producto Interno Bruto Nacional.
(EN NEWS) Con el argumento que se trata de un presupuesto sin partidas secretas, con enfoque social y que al final dará resultados proyectados de “un milagro social“, el Ministro de Hacienda presentó el presupuesto general de la nación 2021 por un monto global de $ 7,453.5 millones de dólares.
Analistas consideran que el plan de gastos 2021 es a todas luces desproporcionado y sin duda lleva la intención política de atacar a la Asamblea cuando sus diputados comiencen a enviar signos de resistencia y acaloradas discusiones con los representantes del Ejecutivo.
El Ministro de Hacienda por fin asistió hoy a la Asamblea Legislativa y no a rendir cuentas sobre la plata que se manejó durante la pandemia, sino a desafiar mediante cuentas alegres a los Padres de la Patria con quienes el Ejecutivo se han enfrentado frecuente y consecuentemente.
Con la «serenata» que a todo mundo gusta escuchar el incremento presupuestario 2021 es justificado por la Administración Bukele con partidas elevadas hacia los rubros de Educación, Salud y Seguridad; por supuesto son temas a los que nadie se resiste, más aún por el candente tema de la campaña electoral.Acompañado por el Secretario Privado de la Presidencia Ernesto Castro, el ministro Alejandro Zelaya, se presentó al recinto legislativo con un ataché repleto de documentos contables y proyecciones fiscales que amparan las cifras del presupuesto, según estiman ambos funcionarios.
Zelaya reafirmó ante el Presidente del Primer Órgano del Estado, Mario Ponce que el plan de gastos generales 2021 en efecto asciende a $7,453.5 millones y de acuerdo a ambos funcionarios del Ejecutivo , cubrirá las amplias deudas que ha tenido el país por 30 años.
De esta manera, para el ramo de Educación, el Gobierno ha destinado $1,320.4 millones, equivalente a un 5% del Producto Interno Bruto (PIB). Su aumento es de $281.2 millones de dólares respecto al presupuesto 2020.
Para Salud, la asignación es de $1,034 millones, con un incremento de $276 millones con relación al presupuesto del presente año. En tanto, a Seguridad Pública se le ha asignado $655.3 millones, con $100.6 millones más de lo presupuestado en el actual presupuesto 2020.
Pese a los alarmantes efectos económicos del COVID-19, Hacienda piensa alimentar este presupuesto con una recaudación tributaria de $5,315.9 millones en el 2021, y para ello intensificará la guerra contra los evasores fiscales.
En sus cálculos felices la recaudación tributaria podría mejorar en un 3.1% respecto al año fiscal en curso. Sólo el Plan anti evasión les hace vislumbrar una colecta de dinero de los contribuyentes por el orden de los $420 millones de dólares.
Para el Presupuesto 2021 la estimación de la brecha fiscal es de $1,342.5 millones. “La pandemia ha golpeado nuestra economía, pero la gestión y las buenas iniciativas ahora nos están dando y nos darán buenos resultados en la etapa de reactivación económica”, afirmó el ministro Zelaya, sin mencionar cuáles iniciativas.
El secretario privado de la Presidencia, Ernesto Castro, dice que este presupuesto contempla aumentos salariales para agentes y empleados administrativos de la Policía Nacional Civil, elementos de la Fuerza Armada y personal del Ministerio de Educación.
Incluye también la contratación permanente de tres mil personas que han estado trabajando contra el COVID-19, y que se han desempeñado mediante contratos temporales.
Sin duda es un presupuesto que ensalza rubros estratégicos como la educación, salud y seguridad, pero que requerirá más endeudamientos que tendrán que pagar las presentes y futuras generaciones de El Salvador; “un plan de gastos más político que realista, no acorde con la situación nacional sobre todo después de los golpes fuertes que ha dado el COVID-19 a la actividad económica», expresó el Sociólogo Ernesto Vaquerano.
