(EN NEWS) —El gran éxito de Tony Camargo: “El año viejo” grabada en 1953 es sin duda una de las canciones más escuchadas por aquellos que despiden con añoranza el año que se va.

“Esa canción se grabó en 1953 y hasta hoy funciona, por decirlo de alguna manera, en muchos hogares se sigue despidiendo el año con ella y eso para mí es un verdadero regalo que la vida me ha dado”, dijo el ya fallecido artista mexicano en una entrevista con Notimex en 2014.

Antonio Camargo Carrasco, más conocido como Tony Camargo, ​ fue un cantante ícono en la época clásica y considerado además uno de los más talentosos de la música típica en su natal México.

Vale decir que el colombiano Crescencio Salcedo es el compositor de “El Año Viejo” y el mexicano Tony Camargo la interpretó; en todo caso, no hay hogar en Latinoamérica que despida el año viejo, sin que deje de sonar en sus radios la voz de estos grandes de la música.

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Este es considerado como un himno melancólico de transición hacia el año nuevo y retrata el duro contraste de emociones que deja el término de un ciclo en el tiempo. Su compositor fue el venezolano Oswaldo Oropeza.

“Las campanas de la iglesia están sonando / anunciando que el año viejo se va / la alegría del Año Nuevo viene ya / los abrazos se confunden sin cesar”, canta en un primer momento su voz grave acompañada por un sentido arreglo musical.

Luego la sonata se llena de más ímpetu y el cantante lanza un anuncio que profundiza el aura melancólica:

“Me perdonan que me vaya de la fiesta / pero hay algo que jamás podré dejar / una linda viejecita que me espera / en las noches de una eterna Navidad”.

En adelante, la escena es compuesta: un hombre entona, su coro lo respalda, mientras millones de personas de habla hispana por el mundo, escuchan la letra entre lágrimas y escasos instantes de una peculiar melancolía.